César Pérez Gellida vuelve a demostrar que es uno de los mejores escritores de novela negra en España con en su nueva novela
- Tapa blanda: 608 páginas
- Editor: SUMA; Edición: 001 (25 de octubre de 2018)
- Colección: Tinta negra
- Idioma: Español
- ISBN-10: 8491292020
- ISBN-13: 978-8491292029
Sinopsis
Una ciudad separada por un muro y unida por un sanguinario asesino. Dos investigadores que descubrirán que la crueldad no tiene límites. Una historia negra para iniciarse en el género Gellida. Viktor Lavrov es un joven talento perteneciente al KGB destinado en Berlín durante el periodo más crudo de la Guerra Fría. Pronto recibirá un delicado encargo que pondrá a prueba sus conocimientos en psicología criminalista y sus virtudes como agente de inteligencia. El caprichoso destino hará que su camino se cruce con el del inspector jefe de la Kriminalpolizei, Otto Bauer, empecinado en resolver las terribles muertes de cinco menores que parecen estar relacionadas entre sí, unos asesinatos que se niegan a reconocer desde las más altas instancias de la RDA.
Con ocho novelas publicadas, César Pérez Gellida es ya un referente en la actualidad literaria de nuestro país.
El vallisoletano regresa ahora con su relato más negro, una historia repleta de intriga, una explosión narrativa que mantiene los ingredientes que han atrapado a miles de lectores y que significa un paso adelante a nivel estilístico con respecto al resto de su obra.
Reseña
Una vez Gellida ha conseguido dejarme pegada al asiento. En el tren Sevilla a Salamanca, con parada en Madrid, he tenido la cabeza pegada en el libro. Y es que su nueva novela tiene eso, que engancha y mucho más.
Ambientada en plena Guerra Fría en Alemania, entre el capitalismo y el comunismo, se nos presenta una novela que mezcla de manera perfecta, y este es uno de los puntos que la hace más atractiva, espías con asesinos en serie.
A pesar de que en un principio la temática de los espías no me sedujo mucho y que no estoy para nada puesta en historia sobre la Guerra Fría, a las pocas páginas de haberlo empezado ya no pude parar. Sí es cierto que me costó hacerme con siglas y algunos nombres, por lo que agradeceré eternamente el índice de personajes que encontré al final del libro.
He de destacar la gran labor que ha hecho el escritor para situar la trama en el contexto histórico en el que se encuentra, fusionando de forma perfecta la parte real con la novela. La descripción de la Alemania occidental es tan precisa, que parece que estuvieras viendo una película. Y no solo en el aspecto histórico, la parte de los asesinatos, el vampirismo y la hematodixia está muy bien explicada, resultando en algunos momentos muy dura y repugnante.
Me ha gustado encontrarme con unos personajes elaborados y cercanos, empatizar con ellos al largo de la historia. Encontrarme con antiguos amigos en su juventud y con otros secundarios como Otto, Brigit, Max, Lucas y Niclas.
Los capítulos están muy bien enlazados, contándonos la historia cronológicamente de forma lineal, separando la parte de espías de la de los asesinatos, lo que hace que la lectura sea más sencilla, pero con un ritmo trepidante que no te dejara respirar.
Es sin duda una gran novela negra, de estas que hacen pensar y que sorprenden con su final. Si no la has leído, ya estas tardando.
Aunque es autoconclusiva, forma parte de una bilogía, así que, por favor, César, no nos hagas esperar mucho para leer Todo lo peor.
