El presidente en funciones del Gobierno de España, Pedro Sánchez, ha elogiado la admirable respuesta de las jugadoras de la Selección Española Femenina de Fútbol frente a las recientes controversias que rodean al presidente suspendido de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales. Durante un evento celebrado en Málaga, Sánchez afirmó que Rubiales ya no puede liderar la federación, argumentando que no es apropiado representar a España mientras se involucra en actitudes y discursos que avergüenzan y no reflejan los valores del país.
En su discurso, Sánchez no mencionó directamente el nombre de Luis Rubiales, pero sus palabras fueron un claro llamado a la renuncia del presidente suspendido de la RFEF. El presidente del Gobierno resaltó la impresionante reacción de la sociedad española ante estos acontecimientos, subrayando que «la marca España» se ha fortalecido gracias a la solidaridad expresada hacia las jugadoras de fútbol.
Sánchez elogió a las futbolistas por su doble victoria: primero, en el terreno de juego, donde demostraron su destreza y determinación, y segundo, al ofrecer al mundo una lección valiosa sobre igualdad de género. El lema «Se acabó», impulsado por las deportistas para denunciar incidentes como el beso no consentido a la jugadora Jenni Hermoso después de la final del Mundial Femenino, ha sido un símbolo de su empoderamiento.
El líder del PSOE destacó la imparable ola de feminismo liderada por mujeres que han decidido no someterse a la dominación masculina en ningún ámbito, incluyendo las relaciones personales y laborales. Sánchez reconoció que aún queda mucho por hacer para lograr una igualdad real y efectiva entre hombres y mujeres, como lo han demostrado los lamentables sucesos relacionados con Rubiales.
Sánchez también hizo hincapié en el apoyo de millones de hombres comprometidos con la causa de la igualdad de género y aseveró que estos eventos no han dañado la imagen de España en el extranjero. Según él, la verdadera «marca España» es la respuesta ejemplar de las futbolistas de la Selección Española de Fútbol y la reacción espectacular de la sociedad española, que ha dejado claro que no tolerará actitudes sexistas y discriminatorias en el deporte o en cualquier otro ámbito. El presidente en funciones instó a que estas acciones tengan consecuencias para todos los líderes involucrados en los lamentables sucesos recientes.
