La victoria del PSOE no le asegura la gobernabilidad sin diálogo y pactos con otros partidos.
Este 28 de abril, hubo una victoria del PSOE en las elecciones generales con una diferencia de 57 escaños con la segunda fuerza política, el Partido Popular. Este último, perdió 71 escaños desde los últimos comicios, en 2016.
De esta manera, el PSOE tiene varias opciones para pactar, ya que la suma de Ciudadanos, PP y Vox no llegaría al número mínimo de escaños para gobernar, 176.
Una de las opciones es gobernar con Ciudadanos. Aun así, según lo que se ha dicho en campaña, Ciudadanos se situaría en la oposición, compitiendo por liderar la derecha.
Aun así, se pudo oír a Pedro Sánchez en Ferraz refiriéndose al pacto con Ciudadanos como algo que no ocurriría después de que su militancia gritara que no querían un pacto con esa fuerza política.
La otra opción sería un Gobierno de izquierdas con Podemos y ERC. Esta opción, significaría pactar con los independentistas, uno de los argumentos que la derecha utilizaba en contra de Sánchez. El líder de Podemos, Pablo Iglesias, ya ha confirmado que se va a sentar con Pedro Sánchez para dialogar y buscar una solución.
También, cabe la posibilidad de un pacto con Podemos y otros partidos como el PNV, teniendo que aliarse con más de cuatro partidos. Coalición Canaria ya ha confirmado que no le tenderá la mano a Pedro Sánchez a raíz de los pactos con los independentistas. Aunque esta parece la opción que más gusta en Ferraz.
Como dijo Pablo Iglesias, momentos después de saber los resultados, será un proceso que durará bastante tiempo para llegar a un acuerdo para formar gobierno.
