Semanas de incertidumbre y tensión en la formación morada. Después de conocerse la gran caída de votantes de Unidas Podemos en las elecciones del pasado 26 de mayo, varios miembros del partido hablan ya de tiempo de reflexión y de autocrítica.
Lo que ocurrió el 26-M tan solo fue la gota que colmó el vaso de un proyecto en caída libre que cada vez está más fraccionado y tiene menos apoyos. El partido que surgiría del famoso «15-M» está en una fase de claro desplome. Pablo Iglesias, justo el día después de las últimas elecciones, achacó los resultados a la división de la izquierda, que cada vez es más patente.
Precisamente, otro de los miembros de Podemos, Ramón Espinar, el que fuese en su día secretario general de Podemos en Madrid, ha criticado en el día de hoy esa fracción que se ha producido y que ha hecho posible esa caída en las urnas. El mismo Ramón ha pedido también una asamblea de ciudadanos de urgencia para abordar la crisis de Podemos, el cual dice «está roto en pedazos».
Pablo Iglesias ya declaró que su puesto siempre está a disposición de las bases pero ha querido ir más lejos y ha sido prudente al convocar para este mismo sábado un Consejo Ciudadano Estatal para tratar los asuntos que más preocupan al partido. La dirección de Podemos hará posible, pues, un «Vistalegre 3» para recuperar a esa gente que se ha quedado en el camino y que ha optado por otras opciones políticas o por la abstención. Veremos si después de este Consejo se convoca también una Asamblea para decidir la Dirección de Podemos en un momento clave para la formación morada.
