El líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ha experimentado una derrota en la primera vuelta de la votación de investidura, al no conseguir el número necesario de apoyos para ser nombrado presidente del Gobierno. Para lograr la investidura, necesitaba la mayoría absoluta en el Congreso, es decir, 176 escaños, pero solo obtuvo 172 votos a favor, provenientes del PP, Vox, UPN y CC. Por otro lado, el resto de la Cámara votó en contra de su investidura.
Si esta situación se repite en la segunda votación, que se llevará a cabo el próximo viernes y que solo requiere una mayoría simple (más votos a favor que en contra), Feijóo perderá definitivamente la posibilidad de ser investido como presidente. A pesar de este resultado, Feijóo ha destacado que el debate de investidura ha demostrado que existe una alternativa en España al modelo de chantajes y concesiones a aquellos que no creen en el país.
La votación se realizó con la participación de todos los diputados, quienes expresaron su voto en voz alta mientras los secretarios de la Mesa del Congreso iban nombrándolos uno a uno. Durante la jornada, se produjo una anécdota cuando el diputado del PSOE por Teruel, Herminio Rufino Sancho Íñiguez, inicialmente votó a favor de Feijóo, pero corrigió su voto de inmediato.
El resultado final de la votación fue de 172 votos a favor de Feijóo y 178 en contra. Con la investidura fallida, el Congreso cuenta con dos meses para encontrar un presidente del Gobierno. En caso de no lograrlo en ese plazo, el rey tendría que disolver las Cortes y convocar nuevas elecciones generales en enero.
El próximo viernes, después de confirmarse el fracaso de la investidura de Feijóo, el rey Felipe VI convocará una nueva ronda de consultas para designar a un nuevo candidato. En este escenario, el líder del PSOE, Pedro Sánchez, parece ser el candidato más probable, aunque aún está en proceso de negociar los apoyos necesarios para su nombramiento. En su intervención final durante el debate de investidura, Feijóo criticó a Sánchez por no haber defendido sus posiciones anteriores ante los españoles y por no ser transparente en sus negociaciones con los independentistas.
Feijóo también destacó que algunos ciudadanos que votaron en las elecciones carecían de información sobre posibles acuerdos relacionados con una ley de amnistía. Afirmó que si estos ciudadanos hubieran tenido conocimiento de la situación actual, la investidura habría tenido un resultado diferente. Agradeció el apoyo de Vox, CC y UPN, y aseguró que los miembros del PP no tendrán que votar en contra de sus principios ni de su programa electoral.
Finalmente, Feijóo reafirmó el compromiso del PP de defender una España de ciudadanos libres e iguales, preservando el Estado de derecho y los principios constitucionales, y garantizó que mantendría su palabra y la de los 11 millones de votantes que respaldaron su partido en las elecciones recientes. Su discurso concluyó con una prolongada ovación por parte de la bancada del PP.
