Novak Djokovic gana en un hermoso partido a Rafa Nadal por 6-4, 3-6, 7-6 (9), 3-6 y 10-8 y mañana medirá sus fuerzas ante Kevin Anderson en la final de Wimbledon, tercer Grand Slam de la temporada.
El capítulo número 52 de la rivalidad entre Novak Djokovic y Rafa Nadal quedará escrito en los libros de historia de Wimbledon. En primer lugar, porque el duelo se tuvo que dividir en dos jornadas y en segundo por el enorme quinto set que tuvo que alargarse hasta que alguien ganara con diferencia de dos.
La primera parte del partido jugada ayer se disputó con luz artificial y con la pista cerrada con el techo retráctil circunstancia que incomodó más a Nadal. Así, Djokovic tuvo en su raqueta el ritmo de los primeros compases del partido y al séptimo juego rompió el saque de Nadal, algo que fue suficiente para posteriormente apuntarse el primer set del enfrentamiento.
A continuación, con el inicio del segundo set, Nadal siguió viviendo algunos momentos complicados. No obstante a la hora de partido, dio muestras de adaptarse al escenario y entre el cuarto y sexto juego, arrebató el servicio a Djokovic en dos ocasiones, lo que le valió para devolver las tablas al marcador al final de la manga.
Llegados a ese instante, el reloj marcaba las diez de la noche (hora británica) por lo que aún se podía jugar al tenis una hora más antes de interrumpir el partido. En el tercer set, Nadal encontró la manera de hacer daño a Djokovic que comenzó a no tenerlas todas consigo ante el empuje del balear. Sin embargo, Nole aguantó y tras un tie-break se fue al hotel con su segunda manga en el bolsillo después de que Nadal no convirtiera tres bolas de set.
Ya en la jornada de este sábado, el partido se reanudó en el cuarto set con un Djokovic atrincherado al fondo de la pista. Su misión era amarrar el resultado pero Nadal no lo permitió fabricándose de salida una buena renta de 3-0. Con este marcador, el de Manacor se enredó al sufrir por sorpresa una desconexión mental y Djokovic enmedó la plana enlazando tres juegos seguidos. Después del empate a tres, Nadal resurgió, cambiando el panorama del set con un break que ahora vez si fue capaz de conservarlo para prolongar la guerra al quinto episodio definitivo.
En el quinto set, ambos jugadores arrancaron bien, sabiendo mantener sus saques al mismo tiempo que procuparaban coger una bocanada de aire que les diera más energía para la recta final del partido. En los momentos calientes, los errores comenzaron a aparecer y ya cualquiera de los dos podía tener la posibilidad de dar un definitivo golpe encima de la mesa. Al final la moneda terminó saliendo cara para el tenista de Belgrado que de esta forma confirma que sus lesiones y sus dudas ya son cosa del pasado.
Así pues, este domingo Novak Djokovic saldrá al tapete verde de la pista principal del All England Club con la opción de ganar el decimotercer Grand Slam de su vida. Su rival será el tenista sudafricano Kevin Anderson que el viernes dejó KO a John Isner tras una batalla de seis horas que se saldó con un resultado 7-6, 6-7, 6-7, 6-4 y 26-24.