Un Cádiz muy vertical ha conseguido encadenar su tercera victoria consecutiva, entrando en puestos de playoffs, y deja sin premio a un Nástic que ha merecido más con una brillante actuación de Luis Suárez.
Se presentaba una tarde prometedora para el submarino amarillo tras el empate que se había producido en el Carlos Belmonte entre Albacete y Oviedo, que les abría las puertas de los playoffs. No podían fallar. Tampoco podía hacerlo el Nástic, que necesitaba los tres puntos para seguir en la pelea por el descenso.
Comenzaba el partido en el Nou Estadi, que lucía con una buena asistencia de aficionados. Los primeros diez minutos de partidos fueron de dominio gaditano, buscando balones en largo e intentando aprovechar la velocidad de sus atacantes para colgar balones al área. Así llegó la primera ocasión del partido a centro de Jairo que acabó con una espectacular doble intervención de Bernabé.
Tras varios balones a la espalda de la zaga defensiva del Nástic, llegó el primer gol de la tarde a manos de Darwin Machís, un autentico golazo del dorsal número 17 por la escuadra derecha tras un pase de José Mari desde su campo a Querol, que le puso un taconazo al venezolano y éste definió de diez.
No tardó mucho en responder el equipo local, que tan solo cinco minutos después aprovecharon un error en la salida de balón de Sergio Sánchez que aprovechó Kanté para asistir a Luis Suárez y que batió al meta albaceteño del Cádiz con una pícara vaselina.
La lesión de Machís, noticia fatídica para el Cádiz
La primera parte estuvo marcada por la comodidad de ambos equipos cuando se generaban espacios de las imprecisiones o errores en los pases. Tras un balón en profundidad hacia Machís, el extremo gaditano se echó la mano al isquiotibial. No podía continuar. Malísimas noticias para el Cádiz que perdieron a su mejor jugador hasta el momento. Salió en su lugar Manu Vallejo, que volvía tras sus molestias.
Y fue con los focos centrados en la lesión de Machís cuando llegó el uno a dos a favor de los amarillos, tras un córner botado por José Mari y que Kanté no acertó a despejar correctamente introduciéndose el esférico en las mallas del conjunto catalán.
La segunda parte comenzó como la primera, con una intensidad altísima, y con un Vallejo muy eléctrico que avisó en el minuto cuarenta y nueve con un disparo que acabó desviando el defensor local a córner.
Segundos más tarde, fue él mismo el que conseguiría poner distancia en el marcador al batir al portero del Nástic nacido en Los Palacios. Los pocos aficionados gaditanos que habían acudido al estadio vibraban de emoción, ya que veían a su equipo más cerca de los puestos de playoffs.
La actuación de Luis Suárez, brillante
El delantero colombiano sería el mejor jugador del partido, a pesar de la derrota de su equipo. Ya había conseguido un tanto en la primera parte, y a pesar de los dos goles de diferencia, no le perdió la cara al partido.
Hizo que la defensa amarilla tuviera un quebradero de cabeza cada vez que tocaba el balón, ya que se internaba en el área con gran facilidad. En el minuto cincuenta y cinco consiguió que el colegiado madrileño señalara penalti, algo dudoso porque pareció fuera del área, y que Kanté convertiría para poner el partido al rojo vivo.
El partido continuó en la misma línea hasta los últimos minutos, en los que los pupilos de Enrique Martín achucharon para intentar lograr el gol del empate. Ante la negativa de éstos, los aficionados se marchaban del estadio decepcionados por una derrota más de su equipo.
Tras esta victoria, el Cádiz se coloca sexto con cuarenta y cuatro puntos, en puestos de playoffs; mientras que el conjunto catalán se hunde aún más cerrando la clasificación de LaLiga 123 con veintiún puntos.
