El beticismo recibió a la leyenda verdiblanca en el acto de renovación que se llevó a cabo en el estadio Benito Villamarín. El portuense no pudo contener las lágrimas.
Joaquín ha renovado con el Real Betis Balompié una temporada más, hasta 2021, tal y como se conoció el pasado jueves en un vídeo que empezaba anunciando la retirada del capitán bético. El acto comenzó con un recibimiento al gran protagonista del día entre una multitud de banderas verdiblancas y con el himno cantado por la gran cantidad de aficionados que completaban dos anillos de la grada de fondo. Estuvieron presentes los directivos del Betis, la plantilla casi al completo y la familia del jugador portuense.
Al extremo del Betis se le vio muy emocionado desde el momento en que tomó la palabra: “Uno no se acostumbra a esto, se lo debo todo a estos colores, a mi familia que es el Betis. Siempre he sentido esto tan especial y yo no me merezco tanto cariño de todos los béticos (…) Dentro intento ser el primero en trabajar, ayudar a los compañeros. Intento disfrutar el día a día porque sé que con 38 años ya cada vez me queda menos”. Aunque no quiere pensar en el adió, es consciente de que el final de su trayectoria futbolística está cerca: “No quiero alargar mi carrera más de la cuenta, pero es difícil encontrar el momento para decir me voy, porque me encuentro bien y compito”, señaló el ‘17’ verdiblanco.
Uno de los momentos más emotivos del acto tuvo lugar en el final del mismo, cuando subieron al escenario el padre de Joaquín, su mujer y sus hijas. Mostraron la imagen de una de las personas más importantes en la vida del jugador, su tío “Chino”, y en ese momento no pudo evitar emocionarse.