12244 espectadores fueron testigos en el Arcángel del encuentro entre España y Alemania sub21.
La selección alemana salió a morder desde el primer minuto, presionando muy arriba a los chicos de Luis de la Fuente.
España llevaba la batuta del partido, a pesar de la presión germana, la rojita conseguía sacar el balón jugado.
Poco a poco, España fue adelantando líneas para obligar a Alemania a jugar en largo.
Fruto de esa presión llegaría el primer tanto del encuentro, obra de Manu García que, con un disparo potente en la frontal del área, conseguía batir al portero germano.
España se sentía más cómodo que Alemania, que no conseguía generar peligro alguno.
Llegaba el ecuador del primer tiempo y la rojita seguía acaparando todas las ocasiones de peligro, lideradas por Dani Olmo muy participativo en la primera mitad.
En el minuto 31, llegaba la primera ocasión de Alemania con un disparo de Luca Kilian que Álvaro Fernández atajó sin problemas.
Pero el partido cambiaría en ese minuto, debido al gol de Alemania por parte de Schlotterbeck, que aprovechaba un fallo defensivo de España y marcaba a placer, estableciendo el empate en el marcador.
Tras el gol, Alemania empezó a creérselo más y poco a poco llegaba al área español, pero sin generar mucho peligro.
Sin ninguna ocasión destacable, se llegaba al final de la primera parte con el partido empatado.
Una segunda parte insípida.
Alemania comenzó dominando la segunda mitad, controlando el juego y llevando a España de lado a lado.
España no conseguía conectar en esta segunda mitad, movía el balón de lado a lado, pero sin un objetivo claro.
Las fuerzas se igualaron con el paso del tiempo, pero ningún equipo originaba peligro alguno.
La rojita cogía confianza mientras los minutos pasaban, pero ninguna de las ocasiones conseguía ver portería.
Gracias a los cambios, la selección dirigida por Luis de la Fuente, ofreció un mejor nivel, anulando el juego germano.
A pesar del dominio, hasta el minuto 75 no llegó una ocasión clara para España, pero el disparo de Oihan fue atajado sin problemas por Grill.
Sin embargo, aunque el partido bajó de ritmo en segunda mitad, la afición española se lo pasaba en grande, repitiendo la “ola”, en numerosas ocasiones.
Se notaba que se trataba de un amistoso porque Alemania bajó un pistón en los minutos finales.
Las fuerzas de la selección también se amuermaron a pesar de los refuerzos en esta segunda mitad.
Al final empate entre ambas selecciones, que dejaron la emoción para la primera mitad.
