Los verdiblancos consiguieron doblegar al HJK Helsinki en la última jornada de la fase de grupos de la UEFA Europa League con autoridad y firmeza y calientan motores de cara al Gran Derbi del domingo.
Con el Gran Derbi en el horizonte Betis y HJK Helsinki protagonizaban un mero trámite en el Benito Villamarín, ya que el equipo español había cerrado su acceso directo a los octavos de final de la UEFA Europa League. Mientras, el conjunto finlandés quedaba apeado de la escena continental al quedar último de un grupo C que fue amo y señor el Real Betis Balompié desde que comenzó la competición. El equipo de Manuel Pellegrini cumplió con su objetivo la semana pasada, justo el jueves anterior cuando asaltó el estadio del Ludogorest con un gol de Fekir para estar en el próximo sorteo de octavos de final de la segunda competición continental que se celebrará el 24 de febrero de 2023 en la casa del fútbol europeo en Nyon, Suiza. Aún así, el cuadro andaluz no se conformaba y quería conseguir la victoria por prestigio, profesionalidad… y dinero. La victoria le daba al Betis unos 630.000 euros para sumar estos a todo lo que lleva acumulado entre las victorias y quedar primero de grupo que son alrededor de 11 millones de euros. Aunque es evidente que pese a esto no se podía parar de pensar en el Gran Derbi del domingo.
El Betis, con la mente más puesta como se comentaba anteriormente en el domingo en un partido que paraliza la ciudad de Sevilla, salió al terreno de juego sin Canales y sin Fekir. Reservados para un choque de alto voltaje que es ante el Sevilla. Pero bueno, eso como hemos comentado el domingo. El partido de hoy comenzó con un Betis mandón teniendo la posesión del balón y estando en campo contrario intentando que el HJK Helsinki retrocediera líneas.
La escuadra finlandesa, dirigida por Toni Koskela, buscaba alguna contra con la que poder materializar el primero del encuentro. También, el balón parado era uno de los fuertes del equipo que procedía del Bolt Arena. Aunque, la calidad del Betis salía a relucir por mediación de Luiz Henrique que estuvo a punto de inaugurar el electrónico con un zurdazo que detuvo el cancerbero del HJK Connor Hazard. El Betis tenía el control del partido, moviendo el cuero de lado a lado buscando los resquicios que dejaba el HJK Helsinki que se resguardaba en su campo intentando cazar alguna contra. Tuvo una, una internada de Pyry Soiri que estuvo a punto de irse de Miranda pero el de Olivares le adivinó claramente las intenciones cuando el finlandés se iba solo a la portería de Rui Silva.
Pese a ser un mero trámite, proponían ambos equipos que buscaban la victoria. El Betis con más ímpetu para llegar bien al Gran Derbi. Lo demostró Aitor Ruibal, exactamente en el minuto 20 de partido. Porque vaya barbaridad el chicharro que se sacó el catalán. Primero la jugada fue de poesía ya que recortó hacia dentro para después sacarse de la chistera un caño espectacular y con un latigazo tremendo batir a Connor Hazard para establecer el primero para el Betis en el luminoso y hacer el delirio del Villamarín por completo con un pedazo de gol que enloqueció el coliseo heliopolitano, ante la maravilla que había firmado su polivalente jugador diestro.
El gol le había hecho mucho daño al conjunto finlandés que no sobrepasaba el medio campo ante un Betis firme que no cesaba en su empeño de buscar el segundo. Dominaba el Betis sin hacer grandes esfuerzos, moviendo el balón bien de banda a banda, con tranquilidad y con un dominio el juego absoluto. El equipo de Toni Koskela no daba señales de vida, también sabedor de que ya no tenía ninguna posibilidad de pasar a las rondas eliminatorias de la UEFA Europa League en la que si estará el Betis.
Rodri, con un gran slalom a lo Messi, pudo establecer el segundo en el marcador pero su disparo salió lamiendo el palo izquierdo de la portería de Connor Hazard. Quien no iba a perdonar sería esta vez Aitor Ruibal por segunda vez consecutiva, que tras un grandísimo centro de Sabaly pudo materializar un gol que tenía toda la pinta de valer tres puntos por el buen juego desplegado por el Betis, y porque fue al filo de una primera mitad donde todo el Benito Villamarín se lo pasaba en grande en unos primeros 45 minutos para enmarcar del conjunto verdiblanco.
Tras el paso por vestuarios, el capítulo número dos del partido continuaba exactamente igual. El Betis dominaba mediante la posesión mientras que el HJK Helsinki se defendía como podía. Pellegrini daba entrada a Canales y Borja Iglesias para que estuvieran rodados de cara al trascendental choque ante el Sevilla.
Luiz Henrique pudo convertir el tercero aunque su potente disparo en el minuto 58 lo detuvo un atinado Connor Hazard que pese a recibir dos goles estaba siendo el mejor del equipo finlandés ya que salvaba a su equipo de una goleada interviniendo en acciones decisivas. Otra vez Luiz Henrique tuvo el tercero poco minutos después, pero su ajustado disparo se marchaba fuera por muy poco y después Canales era quien erraba un buen pase de Rodri mandando el balón a las nubes.
En el minuto 66, Manuel Pellegrini daba entrada al canterano Dani Pérez haciéndolo debutar en partido oficial. También, le concedía minutos a Nabil Fekir de cara al derbi del domingo. El Betis, con un clara autoridad y firmeza en el juego, disfrutaba en un terreno de juego que era una absoluta fiesta tanto en el césped como sobre todo en la grada que se lo pasaba bomba sabedor de que el domingo es un día para dejar K.O a su eterno rival.
El partido no pasó a mayores circunstancias salvó por un gol que anuló el colegiado del encuentro el señor escocés William Collum a el panda Borja Iglesias a falta de 15 minutos para el final pero sí un gol de Fekir en el descuento de un partido que dejo unas sensaciones maravillosas para un Betis que lo próximo que le viene a él y a la ciudad es un partido absolutamente no apto para cardíacos. Porque el domingo hay en juego algo más que tres puntos. Hay en juego quien manda en la ciudad, quien es el dueño, amo y señor de la ciudad de Sevilla. Y esta claro que el Betis llega como favorito ante un rival que llega en su peor momento en descenso y con serios problemas. Porque el Sevilla esta al borde del abismo, en el precipicio y puede ser el eterno rival el Betis quien sea el encargado de tirarlo por el acantilado. Porque el domingo el conjunto verdiblanco puede ser el que remate y hunda definitivamente al Sevilla. El morbo esta servido.
