Funzo & Baby Loud hicieron vibrar la terraza del Auditorio Mar de Vigo con dos conciertos en los que el público se entregó desde el principio.
El Festival TerraCeo recibió a Funzo & Baby Loud, que ofrecieron su espectáculo en sesión vermú y a la luz de la luna. La terraza del Auditorio Mar de Vigo se llenó de jóvenes con ganas de disfrutar, que gritaron todas las canciones y cada vez que veían a sus ídolos. Así, antes de que comenzara cada concierto Funzo & Baby Loud se asomaron desde el backstage para sorpresa de los asistentes.
Abel Caballero, alcalde de Vigo, se encargó, como es habitual, de presentar la cita nocturna tras hablar con los protagonistas, señalando que «they are the best in the world«. «Me dijeron que estuvieron en la Navidad de 2019 y van a estar en la próxima«, apuntaba el regidor mientras el público gritaba al conocer que volverán a la ciudad Funzo & Baby Loud, los jóvenes hermanos alicantinos.
Calentamiento preshow
Antes de que se dejaran ver por el escenario Funzo & Baby Loud, Jay Saez se encargó de comprobar las ganas que tenía el público de cantar con una selección de canciones con las que los asistentes se dejaron la voz. Sonaron temas como Pepas de Farruko, Rueda de Chimbala, Todo de ti de Rauw Alejandro, Caminando por la vida de Melendi y Zorra de Bad Gyal.
Funzo & Baby Loud desatan la locura
Entre gritos de euforia, Funzo & Baby Loud se subieron al escenario al ritmo de Jóvenes no tan locos, tema que los asistentes cantaron a pleno pulmón desde el principio. La participación del público se mantuvo y fue creciendo a medida que avanzaba el concierto con Elixir y Malibú con piña, canción que presentaron preguntando a los asistentes si les gustaba el Malibú con piña. Además, se instauró casi como norma que el público iniciara cada canción cantando un trozo a capela.
«¡Increíble! Estáis cantando de cojones, para que luego digan que si los del norte… ¡los del norte son los que más cantan!«, exclamaba Funzo tras interpretar Destino, tema en el que el público encendió las linternas de sus móviles creando un mar de luces. A pesar de que Funzo estaba afónico se entregó al público y se dejó la piel al igual que su hermano Baby Loud. «Estoy súper afónico y esta canción me sale como el culo, pero si me sale un gallo no os riáis«, explicaba Funzo dando paso a los asistentes para que cantaran a capela Te juro.
Además, en ¿Dónde te espero? introdujeron un guiño a la ciudad, invitando a los asistentes a brindar y a «perrear en la silla». Así, cantaron «todo Vigo la copa al aire» ante un público eufórico. Aún así, esto no fue suficiente y quisieron hacer algo único en la ciudad. «Vamos a inventar algo nuevo. Tenemos que hacer en este concierto algo que no hayamos hecho nunca. Se me acaba de ocurrir una forma de aplaudir que no se haya hecho jamás, algo que se esté inventando en Vigo«, apuntaba Funzo. Así, Baby Loud propuso aplaudir dando golpes con las sillas y acto seguido la terraza del Auditorio Mar de Vigo empezó a vibrar con el temblor de las sillas.
La luz del público
Funzo pidió al público que encendieran las linternas de sus móviles para interpretar Hoy ese día y crear una atmosfera mágica, preludio de uno de los momentos más especiales de la cita. Baby Loud se encargó de presentar el tema: «Me vi Kung Fu Panda hace poco y saqué una conclusión de la peli. Hay un momento en el que dicen que el pasado no existe y que el futuro aún está por llegar, que lo único que tenemos realmente es el presente y que por eso se llama presente porque es un regalo, entonces qué mejor que la canción que viene ahora para representar eso, que cada día es importante, que hoy es ese día«.
Las linternas de los móviles fueron esenciales en Andrómeda. «Vosotros vais a encender la luz de vuestro móvil y cada uno va a ser una estrella y entre todos vamos a formar la galaxia Andrómeda«, explicaba Baby Loud. Así, cantaron el tema iluminados únicamente por el público. «Os voy a pedir que no bajéis la linterna del móvil porque para mí es increíble estar aquí viendo esto«, señalaba Funzo. Asistentes y artistas disfrutaron del momento más mágico y especial de la noche. Otro momento destacado fue cuando preguntaron si era el cumpleaños de alguien y al descubrir que un par de personas cumplían años empezaron a cantar el cumpleaños feliz de una manera muy particular.
Derroche de energía y felicidad
Funzo & Baby Loud no dejaron de moverse por el escenario y acercarse al público, mostrándose cercanos y reconociendo lo felices que estaban, sintiendo el calor del público que disfrutó de cada segundo. «¡Qué momentos, qué felicidad!«, exclamaba Funzo tras interpretar Poca suerte, canción que empezaron y acabaron interpretando con el público dando palmas y cantando a capela.
Antes de cantar Todo roto, Funzo pidió a una pareja que se besara. «He visto antes una pareja que no podía concentrarme cantando porque estaban ahí besándose. Ha sido lo más bonito del día«, confesaba. Tras el bello momento, Baby Loud apuntó que venía «una canción triste» que los asistentes cantaron al principio a capela y después empezaron a levantar los brazos formando un corazón, gesto que no pasó desapercibido. «Me encanta cuando surgen cosas espontáneas como que os habéis puesto un montón el corazón«, indicaba Baby Loud al acabar de interpretar Todo roto.
Casi llegando al final de la cita cantaron a capela con el acompañamiento del público temas propios como Tú y yo somos y Perfecta, y versionaron canciones que los asistentes demostraron conocer bien dejándose la voz en Soldadito marinero de Fito & Fitipaldis, Pepas de Farruko, Tenía tanto que darte de Nena Daconte, Yo te esperaré de Cali & El Dandee.
Despedida en el ‘Batmóvil’
Las canciones más populares de Funzo & Baby Loud estaban reservadas para final y cerrar el concierto por todo lo alto. «No estoy muy a favor de las redes sociales y cuando veo gente que viene a un concierto mío a besarse, a llorar y a cantar mis canciones me hace pensar ‘tío, estás haciendo algo bien en tu vida’. Es una sensación de realización saber que estáis aquí, que estoy a 1.000 kilómetros de mi casa y aún así viaje a donde viaje va a haber miles de personas dispuestas a dejarlo todo y a cantar«, confesaba Funzo.
Joven para siempre, fue la canción con la que se despidieron en un primer momento del público. «Esta es la última canción así que vamos a cantarla con fuerza, con energía, con rabia, pero de la positiva«, señalaban antes de bajarse del escenario para cantar entre el público, lo que provocó una estampida de asistentes que se levantaron de sus sillas y fueron corriendo hacia sus ídolos.
Aunque el concierto parecía que ya había acabado, pues Funzo & Baby Loud se metieron en el backstage, aún quedaba un tema más que presentaron con bromas mientras algunos recogían sus cosas y se disponían a abandonar la terraza del Auditorio Mar de Vigo.
«Hay un coche mal aparcado fuera, por favor el propietario que se lo lleve. Un coche negro, parece el coche de Batman. Por favor, que alguien mueva ese Batmóvil«, bromeaban antes de regresar al escenario. «¡No nos íbamos, era la típica broma!«, explicaba Baby Loud. Así, Batmóvil fue el broche de oro al paso de Funzo & Baby Loud por Vigo. Se despidieron, como no podía ser de otra manera, con el público cantando a pleno pulmón, siguiendo también la petición de los artistas: «os voy a pedir que cantéis como si fuera el último día de vuestra vida«.