La Térmica de Málaga acoge la primera edición del festival DOC DOC, que une cine documental y literatura. Diversos escritores arrojan luz sobre un oficio «endiabladamente difícil».
Hay un truco muy viejo para no ponerte nervioso cuando te enfrentas a una audiencia. “Imagínate al público desnudo o en ropa interior”. Sirve para darte cuenta de que todo el mundo es un poco ridículo, no solo tú. Juanjo Millás hace algo parecido cuando habla sobre el oficio de la escritura. “No deja de ser una persona que se levanta y se sienta a escribir en pijama para que otra, también en pijama, lo lea”. Cuando consigue que el público se imagine a Cervantes en pijama es cuando empieza la charla.
Habla desde la buhardilla de su casa a La Térmica de la Malagueta. No ha podido venir por un fuerte brote de alergia. “No está la cosa como para ir estornudando en el AVE, así que estoy aquí hasta arriba de antihistamínicos”. Sí que están Mara Torres, periodista que dirige El Faro en la Cadena SER, y Antonio Orejudo, autor de “Ventajas de viajar en tren”.
La gimnasia de escribir
Se han reunido para hablar sobre “la gimnasia de escribir”, un oficio con mil sombras, algunas redondas y otras punzantes. Intentan dar luz con la pequeña linterna que les ha proporcionado la experiencia a una audiencia en su mayoría compuesta por estudiantes de periodismo.
—Al empezar una novela debes empezar un diario en paralelo. Cuando la acabes, la tiras y publicas el diario —el público se ríe, pero Millás, que es fulminante, habla en serio.
—Escribir es endiabladamente difícil, hay que estar un poco enfermo para esto —otra frase para enmarcar.
La literatura como matrimonio
—Lo malo de esta profesión es que cuanto más escribes, menos se va pareciendo a lo que tenías en mente. Es andar hacia atrás —Antonio Orejudo tampoco se queda corto, y se confiesa. —Cada vez que me pongo con una novela es como un matrimonio. La pasión de los primeros meses se acaba, y cuando se la doy a mi editor para que la publique siento que es como un divorcio. No quiero saber nada más de ella.
Una chica pequeña y de voz aguda, Laura, entona una pregunta. El público se gira para mirarla. ¿Qué novela cambió sus vidas? El ansia de llenarte la cabeza con lo mismo que tus escritores favoritos. “A veces digo que La Metamorfosis de Kafka y así la gente se queda tranquila”. Pero Millás reflexiona un rato para volver a su contundencia. “En realidad la novela que cambió mi vida fue la primera que leí”.
En el verano de 2021 se ampliarán los diálogos en el marco del festival DOC DOC, y se proyectarán documentales literarios sobre la vida de diversos autores, de producción española e internacional. El aforo es muy limitado y las condiciones no ayudan a nada, pero la cultura en Málaga se cuela por cualquier brecha.
