Reseñamos Cuaderno de tormentas, una de las primeras grandes obras de David Rubín que ha recuperado Astiberri en una edición ampliada
David Rubín es en la actualidad uno de los grandes nombres del cómic español contemporáneo. Una de sus primeras obras, Cuaderno de tormentas, se publicó por primera vez en 2008 por Planeta de Agostini y ha sido ahora recuperada por Astiberri, aprovechando el renovado interés por el artista una vez que ha consolidado su trayectoria tanto en España como en el mercado extranjero.
Cuaderno de tormentas presenta una reflexión sobre el artista y el proceso creativo a través de una historia de fantasía oscura, que se plantea a través de una combinación de cómic, cuaderno de viajes y relato ilustrado. El protagonista es un artista falto de inspiración, una suerte de álter ego de Rubín que guiará al lector a través de su visita a Ciudad Espanto.
Tanto en el apartado narrativo como en el apartado artístico, David Rubín se muestra talentoso a la hora de plantear las desventuras del artista protagonista en su búsqueda de inspiración. Hace gala de una paleta de color opresiva que transmite de un vistazo la angustia del bloqueo creativo mediante el uso de colores rojos y púrpuras de gran intensidad.
Pese a tratarse de una obra temprana en la trayectoria de Rubín, comparte el reconocible estilo del artista, así como un uso del color también muy característico. En este sentido, resulta muy grato comparar la evolución respecto a títulos más recientes, como el primer volumen de Ether, también publicado por Astiberri, que tuvimos ocasión de reseñar aquí.
La nueva edición de Astiberri incluye algunos extras respecto a su primera publicación, aunque su principal mérito es poner de nuevo al alcance de los lectores uno de los primeros títulos del célebre autor, ya que últimamente se había vuelto muy complicada de conseguir.
