Este nuevo concepto de cine, nacido en París, supuso un cambio en la forma de entender el considerado como el séptimo arte; seguido de la pintura y la literatura. En este artículo estudiaremos su significado y origen. Así como algunos ejemplos de filmes pertenecientes a este género.
El concepto de «cine de autor» no podía haber surgido en otro sitio que no fuese «la ciudad de la luz, el amor y la creatividad». Sí, hablamos de Francia. Este movimiento cultural nació durante la década de los 40, en la que los largometrajes eran aún en blanco y negro y estaban, en gran parte, marcados por la censura. Lo que hizo que su aparición tomara más relevancia. Diez años después, entrados ya en la década de los 50, el término acabaría de asentarse en la sociedad, gracias al francés: François Truffaut.
Cuando hablamos de este nos referimos a todas aquellas películas en las que una sola persona, en este caso el director, tiene casi el 100% del peso de su elaboración. Es decir, este no se encarga únicamente de dirigir, sino que posee un papel más relevante. Redacta y adapta los guiones, produce y rueda, entre otras muchas tareas. Podríamos considerar que estas cintas tienen un plus en comparación a otras donde, en su creación, participan muchas personalidades con diferentes roles cada una. Los creadores de este tipo de filmes, en ocasiones, pueden ir incluso más allá; legando a tener su propio papel en las películas inventadas por ellos. Consiguiendo así marcar una titularidad que va más allá de los créditos.
Los expertos audiovisuales André Bazin y Alexandre Astruc, ambos franceses, empezaron a reivindicar que el rol de un director podía superar el de cumplir con una simple función en las creaciones de sus obras. Desde ese momento han surgido multitud de largometrajes y autores que lo demuestran. Podemos destacar, por poner un ejemplo, a Christopher Nolan. El director, guionista y productor británico cuenta con cintas como: Tenet (2020) o The Dark Knight Rises(2012), ambas consideradas de autor por cumplir con las características mencionadas.
Por otro lado, si nos vamos al terreno hispanohablante, tenemos el caso del archiconocido Guillermo del Toro. Entre sus obras podríamos destacar, por ejemplo: La forma del Agua (2017), gracias a la cual consiguió el Globo de Oro a mejor director. Así como la más reciente: El Callejón de las Almas Perdidas, del año 2021. También debemos nombrar, si nos queremos centrar en España, a Pedro Almodóvar con Todo sobre mi Madre (1999) o sus más recientes: Dolor y Gloria (2019) y Madres Paralelas (2021). Resalta también la producción Destello Bravío de Ainhoa Rodríguez. Esta última ya debutó el año pasado en el Festival de Málaga 2021, en el cual se esperan muchas más producciones, pertenecientes a este género, para este año. Muy pronto las conoceremos.
Todavía no sabemos con exactitud el rumbo que va a tomar la cinemática y cuáles serán las sucesoras de las cintas nombradas. Lo que sí tenemos claro es que, pese a los cambios y la evolución del streaming, el considerado como séptimo arte está para quedarse y, sobre todo, seguir sorprendiéndonos. Mientas que en aquellas butacas, cada vez más modernas y llamativas; pero con una esencia similar a la que tenían cuando las pantallas reflejaban las imágenes en monocromo: reímos; nos emocionamos y nos identificamos con vidas de las que, sin conocer, aprendemos y admiramos.
