Los universitarios madrileños piden que los exámenes sean online

Las pruebas de evaluación en las universidades de la Comunidad de Madrid van a dar comienzo en medio de dos olas: la de frío y la de Covid-19.

El curso 2020/2021 comenzó con muchas incertidumbres. Más tarde de lo habitual, los universitarios regresaron a las aulas por turnos, con las ventanas abiertas y sin saber hasta cuándo podrían ir. Pero desde septiembre las universidades impusieron los exámenes presenciales sin atender a otros factores como la incidencia que habría en enero después de Navidad o las bajas temperaturas de estas fechas.

Los alumnos protestaron desde el primer momento. Si durante el cuatrimestre han tenido que ir en dos turnos, ¿por qué a los exámenes sí pueden ir todos los alumnos? Si no nos podemos juntar más de 6 en una terraza al aire libre, ¿por qué si podemos juntarnos más de 100 en un aula? Pero las quejas se han intensificado los últimos días. La Comunidad de Madrid no solo atraviesa la tercera ola de la Covid-19 con una incidencia por encima de los 600 casos, sino que además está sufriendo las consecuencias de la borrasca Filomena.

En los últimos días, las fuertes nevadas han obligado a cerrar los centros universitarios y muchos no han tenido problema en trasladar la docencia presencial a online. Sin embargo, siguen sin estar dispuestos a hacer los exámenes de forma telemática ante las bajas temperaturas previstas.

Marina, estudiante de Relaciones Internacionales de la Complutense, clamaba contra la falta de calidad en la docencia online, basada en demasiadas ocasiones en que los alumnos se leyeran PDF para aprender el temario.

https://twitter.com/marinaalenard/status/1348651932441833472?s=20

Por tanto, el escenario que las universidades plantean es comenzar en los próximos días los exámenes de forma presencial juntando a cientos de estudiantes en las aulas y pasillos sin apenas distancia, obligándoles a soportar bajas temperaturas para poder ventilar el aula y con el miedo de que el compañero de al lado pueda tener el virus.

A pesar de que los universitarios están usando sus organismos como asociaciones o delegaciones de estudiantes, los rectores madrileños siguen desoyendo las peticiones de sus alumnos y dan más importancia a que no se copien que a que no se contagien.

Desde las universidades tampoco prestan atención a factores importantes como la movilidad de sus alumnos. Muchos de los jóvenes que regresan estos días a Madrid para hacer los exámenes vienen de zonas confinadas por el alto número de casos. Vuelven a la región usando el transporte público e irán en el mismo medio a las pruebas de evaluación. Muchos otros viven en zonas confinadas de la comunidad. Cada vez son más los ingredientes disponibles para grandes brotes en una Comunidad de Madrid cuyos hospitales están sufriendo la presión de la tercera ola.

Los alumnos insisten: no quieren los exámenes online para poderse copiar. Quieren los exámenes online para no poner en riesgo ni a sus familiares ni a ellos mismos. No quieren juntarse 100 personas en un aula después de atravesar la región en transporte público. Quieren hacer los exámenes de forma telemática para evitar estar en una clase con las ventanas abiertas mientras en la calle hay 1ºC.

Llegados a este punto y ante el pasotismo tanto de las universidades como del ministro Manuel Castells, muchos estudiantes se preguntan hasta qué punto su salud es importante y temen ser el objetivo de campañas que les criminalicen como ocurrió durante la segunda ola por culpa de unos exámenes que podrían haber sido online.