Con más de 600 partidos a sus espaldas, 82 goles y 20 títulos con el Real Madrid, el capitán cumple 14 temporadas con el club merengue.
Sergio Ramos cumplió ayer 14 años desde que llegó al conjunto blanco. Se dice pronto. Aquel 8 de septiembre del año 2005 era presentado en el Santiago Bernabéu un joven de 19 años con ganas de saltar al estrellato futbolístico. Y es que aquel niño que lucía una sonrisa de oreja a oreja en uno de sus días más importantes, jamás imaginaría cosechar una carrera tan plagada de éxitos. Lo mejor estaba por llegar en aquella niñez que con el paso de los años fue madurando hasta convertirse, poco a poco, en lo que es hoy: una auténtica leyenda blanca.
Palmarés de un campeón nato
En más de 12 años como madridista Sergio Ramos ha conseguido 20 títulos. Un palmarés envidiable a la altura de muy pocos jugadores. 4 ligas, 2 Copas del Rey, 3 Supercopas de España, 3 Supercopas de Europa, 4 Mundiales de Clubes y 4 Champions League son los trofeos que, de momento, ha conseguido el sevillano en el conjunto blanco. Se convierte así en el segundo jugador de la historia del Real Madrid con más títulos, solo por detrás de Paco Gento, con 23.
Goles para la historia
No cabe duda que la huella que Sergio Ramos ha dejado en el cuadro de la capital es imborrable. Los años llenos de entrega, lucha y compromiso con la elástica blanca le han catapultado a la mayor de las glorias deportivas. Siendo dueño y señor del número 4 y pieza fundamental en la defensa, el camero ha demostrado tener madera de líder desde que portase el brazalete de capitán.
Pero si hay algo que ha caracterizado a Sergio Ramos en su carrera con el Real Madrid eso, sin duda, es la palabra gol. Y es que 82 han sido los tantos que el de Camas ha anotado con el Real Madrid. Cifras goleadores de ensueño para un defensa. De todos ellos, el que quedará grabado en la memoria y corazón de todo hincha madridista será el de aquella final de Champions ante el Atlético de Madrid en el último minuto. Aquel gol no solo supuso un paso gigante para hacerse con la tan ansiada décima. Aquel tanto también marcó un antes y un después en la historia del Real Madrid en Europa. No menos importante fue el que anotó dos años después ante el mismo equipo, misma competición y misma ronda eliminatoria. La diana del capitán, al igual que en 2014, abrió la veda para que el Madrid volviera a alzarse con la orejona.