‘Canal Connect’ es lo nuevo que se está desarrollando hasta el próximo domingo en Teatros de Canal, conectando con la tecnología y el teatro.
Teatros del Canal está desarrollando hasta el próximo domingo una experiencia artística que ha bautizado como Canal Connect. Con este programa de actuaciones, exposiciones, instalaciones interactivas y conferencias se quiere mostrar cómo las nuevas tecnologías se aplican en distintos ámbitos del arte.
Los organizadores del evento han declarado: «el arte, la ciencia y la tecnología discurren por caminos paralelos. La creatividad encuentra en la tecnología digital y en la ciencia un aliado extraordinario.»
El programa incluye la representación de varias piezas teatrales, como Initial Anomaly, que explora las posibilidades y peligros de la inteligencia artificial. Es una propuesta de la compañía francesa System Failure, que cierra una trilogía iniciada con una propuesta que denominó de igual manera.
En esta tercera entrega los miembros de la compañía se enfrentan a la idea de su propia muerte e imaginan un programa inteligente encargado de crear sus espectáculos póstumos. Nos preguntamos si será posible que un algoritmo que se ha alimentado con guiones de películas y series de ciencia ficción, además de música y coreografías seleccionadas por miembros del equipo, sea capaz de reproducir el estilo de la compañía.
¿Cuándo y dónde verlo?
Este espectáculo se representa el jueves once de marzo. Pero hasta el día catorce hay programadas otras cuatro propuestas escénicas en las salas roja y negra.
También permanecen abiertas en los distintos vestíbulos, espacios abiertos y centro coreográfico del complejo una serie de exposiciones e instalaciones procedentes de países como Taiwán, Japón, Irlanda, Bélgica o Canadá. Los asistentes pueden contemplar el funcionamiento de estos circuitos o los vídeos que complementan algunas de las propuestas. La abundancia de actividades y los horarios correspondientes, hacen aconsejable informarse en la página web del teatro para comprobar el calendario.
En definitiva, todo el edificio del Canal se ha puesto a disposición de la tecnología experimental más avanzada en el siglo XXI.
