Lo que se vivió la madrugada del 9 al 10 de octubre en el teatro Microsoft (Los Angeles) fue algo sin precedentes. Hacía años que la conocida gala de premios musicales American Music Awards no daba tanto de qué hablar
Con las primeras imágenes de la alfombra roja ya se anunciaba lo que se venía. Una noche llena de celebridades, glamour y, sobre todo, música.
Una de las razones por las que estos premios son tan aclamados es porque el propio público es quien decide. Hace unas semanas se abrieron las votaciones, gracias a las cuales cualquiera puede elegir desde casa a su artista favorito.
El evento fue abierto por Taylor Swift, como ya anunciábamos en este periódico con anterioridad. Cantó ‘I did something bad’, uno de los temas de su último álbum: Reputation. Además, la cantante no solo dio el pistoletazo de salida a la noche, sino que además se llevó los cuatro premios a los que estaba nominada. Así, la cantante se convertió en la mujer más premiada en la historia de los AMAS con 23 galardones, más que Witney Houston.
Swift no fue la única triunfadora. Su compañera de tour y amiga Camila Cabello de igual manera se fue a casa con 4 premios como artista del año, canción favorita de pop-rock, vídeo del año y colaboración del año. Además, también cantó una nueva versión de su tema ‘Consequences’. Otros ganadores fueron Post Malone, Carrie Underwood, Khalid y Rihanna, entre otros.
La noche también dio cabida a la música latinoamericana de la mano de J Balvin y Bad Bunny, quienes cantaron ‘I like it’ junto a Cardi B.
Además, los American Music Awards no solo homenajearon a los mejores artistas del panorama musical actual, sino que también hicieron un tributo a la recién fallecida Aretha Franklin, siendo este uno de los momentos con más emoción de esta noche para el recuerdo.