Desde la Cadena SER se ha celebrado este viernes un tenso debate. El encuentro entre el resto de cabezas de lista de los diferentes partidos políticos, sin contar con Isabel Díaz Ayuso, ha estado marcado por un duro encontronazo verbal entre Rocío Monasterio, líder de la extrema derecha, y Pablo Iglesias, de Unidas Podemos.
El líder del partido de la izquierda morada, ha abandonado la sala de los estudios radiofónicos después de que Monasterio le espetara “lárguese” reiteradas y cansadas veces, y de que pusiera en duda, hasta en varias ocasiones, que recibiera un sobre con cuatro balas y una amenaza de muerte contra él y su familia.
Ángel Gabilondo, del Partido Socialista, Mónica García, de Más Madrid, y Edmundo Bal de Cs condenaron a Vox, y pidieron a Iglesias que regresara al encuentro entre partidos. Al no hacerlo, Gabilondo y García anunciaron, a penas unos minutos después, que también dejaban el estudio. La SER, viéndose en una calle sin salida, ha decidido finalizar el debate. Más que nada para que Monasterio no hablase sola durante horas, cosa que podría consonar con su grado de locura.
El PP ha publicado un mensaje en la red social de Twitter, que ha borrado posteriormente, en el que se mofaba de Iglesias: “Cierra la puerta al salir”, decía. Posteriormente, ha publicado un nuevo mensaje, esta vez sí, condenando las amenazas, tal y como les ha debido de sugerir el community manager. El líder del PP, Pablo Casado, se ha expresado en idéntico sentido, como no podría ser de otra manera.

Más Madrid y Unidas Podemos han anunciado que no acudirán a más debates con la ultraderecha, porque resulta denigrante darle voz a este partido tan retrogrado y analfabeto. Gabilondo, por su parte, ha justificado su abandono, como lo habría justificado Machado en el Juan de Mairena, pero en la SER: “Dejo los espacios donde no hay una conversación”.
