Los goles de Gerard Moreno y Capoue suponen que el Real Valladolid se encuentre en una situación límite a falta de dos jornadas. Sólo una victoria ante el Atlético de Madrid o Real Sociedad evitaría el descenso del club vallisoletano.
El aficionado vallisoletano ya no aguanta más, cansado de ver al equipo de su ciudad menospreciar la máxima categoría del fútbol español como si no fuese de vital importancia para el proyecto del club. Con tres finales por delante, a lo mejor una inyección moral era lo que necesitaba la plantilla para revertir su situación visto que con el factor deportivo no ha sido suficiente a lo largo del curso. Y la afición asaltó las calles con sus banderas y camisetas blanquivioletas durante el trayecto final del autobús del equipo. Pero de poco sirvió.
Recital de Gerard Moreno
Sergio González ha pasado de ser un entrenador cuyas alineaciones se conocían de memoria a terminar escogiendo un once diferente en cada partido en la recta final de la campaña. Cuando los resultados no han llegado, ha buscado revertir la situación con todas las fórmulas posibles que le permite su equipo. A tal nivel ha llegado que rota a Masip y Roberto en cada partido. Sin embargo, hoy la sorpresa llegó con la titularidad de Toni Villa, sin minutos en 12 de los últimos 13 partidos, y suplencia de Lucas Olaza, que había completado los 90 minutos en 12 de 14 partidos desde que es jugador del Real Valladolid. Y víctima de tal improvisación en las alineaciones, el primer tiempo se vio notoriamente superado por el Villarreal.
Unai Emery no quiso que su equipo perdiese ritmo en vistas de la futura final de la Europa League y no tardó en llegar el primer aviso en la portería de Roberto. Gerard Moreno encontró el desmarque de Pedraza ante el despiste de Plano y el lateral, con un perfecto recorte sobre el extremo, habilitó a Moi Gómez cuyo disparo fue desviado por Bruno en la línea de gol. Sería la primera acción de una exhibición de Gerard Moreno entre líneas, la de un capitán sin brazalete que interpreta el juego como pocos. Tanto él, como Trigueros y Moi Gómez, alocaron al mediocampo rival con continuas permutas, atrayendo y creando espacios. Tanto Pedraza como Peña aprovecharían todos los metros que tenían por delante para percutir como puros extremos.
Sin capacidad de reacción
No estaba siendo una primera parte digna para un equipo que pelea por evitar el descenso. El Villarreal jugaba sin sentirse incomodados por la presión alta del equipo de Sergio. Pau Torres superaba líneas con facilidad para buscar a Gerard Moreno, y tampoco el Real Valladolid aprovechaba esas salidas de posición del central con rápidas transiciones. Únicamente el desborde de Toni Vila, que nunca se esconde y cuya actitud es irreprochable, rompía el ordenado bloque construido por Unai Emery. En Weissman encontraría su único apoyo para convertir sus jugadas en ocasiones, sin embargo, el resultado de cada acción dependía de escasos centímetros.
El Real Valladolid aguantó el primer asalto, y como viene demostrando en los últimos partidos, el equipo de Sergio se pierde en las segundas partes. Cuestión de físico o problema de confianza. La primera ocasión de Pedraza que evitó Roberto no era más que el inicio de un desenlace fatal. El Yamiq, al que le habían perdonado una expulsión tras un golpe sobre Gerard Moreno, sumaba un error tras otro y condicionó a Nacho en el primer gol del partido. El marroquí se olvidó de cubrir el espacio a su espalda y el ‘7’ del Villarreal lo aprovechó ante la lejana distancia que le separaba con Nacho. El lateral consiguió frena a Gerard Moreno pero este sólo estaba preparando su jugada y con calma puso el 0-1 en el marcador. El delantero se convertía así en el máximo goleador del club con 55 goles en LaLiga superando a Diego Forlán.
A la desesperada y con más amenaza que verdadero peligro, el Real Valladolid buscó el empate con tres delanteros sobre el campo. Pero, muchas veces, colocar más jugadores ofensivos no significa que vayas a atacar mejor. Es más, tiende a desequilibrar al equipo. Diversos tímidos intentos de Guardiola fueron las únicas ocasiones que generó el Real Valladolid en 45 minutos. Capoue asestaría el golpe final gracias a otro error de El Yamiq y que coloca al Real Valladolid al borde del abismo a falta de dos jornadas.
FICHA TÉCNICA
Real Valladolid: Roberto; Janko, Bruno, El Yamiq, Nacho; Joaquín (Alcaraz 55’), Fede San Emeterio (Kiko Olivas 75’), Roque Mesa (Guardiola 55’), Óscar Plano (Míchel 75’), Toni Villa (Marcos André 75’); Weissman.
Villarreal: Asenjo; Peña, Albiol, Pau Torres, Pedraza; Capoue, Parejo, Trigueros (Baena 90+2’), Moi Gómez (Alberto Moreno 90+3’); Gerard Moreno, Paco Alcácer (Yeremy Pino 61’).
Goles: Gerard Moreno (0-1, 68’), Capoue (0-2).
Árbitro: De Burgos Bengoetxea.
Estadio: Nuevo José Zorrilla.
