El juez que investiga la operación Kitchen propone juzgar al exministro de Interior por estos hechos, mientras que ha dejado fuera del caso a la exsecretaria general del PP y ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal.
Además de a Cospedal, el magistrado de la Audiencia Nacional, Manuel García Castellón, también archiva el caso por falta de indicios para su marido, Ignacio López del Hierro, después de que meses atrás se les imputara al considerar que pudieron tener un papel decisivo en la captación del chófer de Bárcenas, Sergio Ríos, como confidente policial para la operación.
El auto de pase a procedimiento abreviado deja a las puertas de juicio a Fernández Díaz y al que era su número dos, el ex secretario de Estado de Seguridad Francisco Martínez, al exdirector adjunto Operativo de la Policía Eugenio Pino, a responsables policiales como José Luis Olivera, Marcelino Martín Beas, o Andrés Gómez Gordo, que fue exasesor de Cospedal; al excomisario Manuel Villarejo, y a Sergio Ríos Esgueva, entre otros.
El juez descarta la existencia de una trampa política ajena al Ministerio de Interior y cree que los hechos podrían estar ligados a delitos de descubrimiento y revelación de secretos, prevaricación, omisión del deber de perseguir delitos, cohecho, tráfico de influencia y malversación.
García Castellón ha tomado esta decisión sin llegar a citar al expresidente del Gobierno Mariano Rajoy, con quien Villarejo aseguró haber intercambiado mensajes para tratar los avances de la operación «Kitchen».
