El candidato del partido derechista Forza Italia ha prometido expulsar a 600.000 inmigrantes sin papeles si gana las elecciones de marzo
El primer ministro de la derecha italiana, Silvio Berlusconi, dijo recientemente en una entrevista televisada que la inmigración es “una bomba social lista para explotar”. “La inmigración se ha convertido en una cuestión urgente porque después de años de un gobierno de izquierdas hay 600.000 inmigrantes que no tienen el permiso a quedarse“ continuaba diciendo el político milanés .
Atentado racista
Estas declaraciones fueron dadas días después del atentado racista de seis ciudadanos africanos en la ciudad italiana de Macerata. cinco hombres y una mujer; todos ellos resultaron heridos. El autor de los disparos es Luca Traini, político del partido de extrema derecha Liga Norte, que forma parte de la coalición de derechas liderada por Berlusconi.
La justificación de la extrema derecha
Traini no mostró ningún remordimiento. Su forma de justificar el hecho fue que lo había hecho en represalia por el asesinato de Pamela Mostropietro, en el que se detuvo al nigeriano Innocent Oseghale. El líder del partido Liga Norte, Matteo Salvini, se distanció del actor de dicha masacre, pero declaró que “no puedo esperar a entrar al gobierno para restaurar la seguridad, justicia social y serenidad de Italia«.
Este asesinato ha sido utilizado por todos los políticos de derecha y extrema derecha para promover su mensaje anti inmigración ya que al sospechoso del asesinato se le había denegado el asilo el año pasado y permanecía en Italia de manera ilegal.
Vacío de liderazgo
¿Cómo puede ser que un político acusado de corrupción, machismo y racismo haya conseguido no solo presentarse a candidato, sino liderar las encuestas? Según el profesor en políticas Giovanni Orsina, autor de Berlusconi and Italy, el candidato de 81 años se ha valido del vacío de liderazgo existente en el panorama político italiano. Los últimos años de la política italiana han sido inestables, el líder de centro izquierda, Matteo Renzi, renunció en 2016 tras perder el referéndum en el que proponía una reforma constitucional.
El regreso de la política de Berlusconi
No hace mucho Italia parecía haber dejado de lado a Berlusconi. En 2011 el magnate de los medios fue obligado a renunciar entre la avalancha de casos de corrupción sumado a la crisis económica italiana. Recordemos que un año después no pudo presentarse a las elecciones por estar acusado de fraude entre otros. Aún hoy en día sigue sin poder serlo, pero puede presionar desde dentro del gobierno siempre y cuando su coalición gane la mayoría.
Ha vuelto y se posiciona en los primeros puestos para ganar las elecciones del 4 de marzo. El movimiento cinco estrellas liderado por Di Maio, que se autodefinen como una libre asociación de ciudadanos conocido por escepticismo europeo, antieuro y ecologismo; son el partido que se posiciona en el primer lugar en las encuestas con un 27% a 29 % de intención de voto. Le seguiría el Partido Democrático de centro izquierda de Renzi con un 28% de votos.
En tercer lugar la coalición de Berlusconi con una intención de voto de 18%, compuesta por su partido Forza Italia, y dos partidos de extrema derecha La Lega Nord (liga norte) y Frateli d’Italia (Los hermanos de Italia). Hay ciertas diferencias entre estos partidos, pero con Berlusconi al mando el grupo parece mucho mas unido.
