El 1 de febrero la Guardia Civil facilitó un informe a Pablo Larena, juez del Tribunal Supremo, en el que se señala a Jaume Roures, fundador de Mediapro, como “elemento capital” en la estrategia de movilización social puesta en marcha por los independentistas dentro del documento EnfoCATS, requisado en los registros del 20 de septiembre en el domicilio de Josep María Jové.
En dicho documento se llega a indicar que el empresario “podría integrarse en el Comité Ejecutivo que se plasmó en el documento en calidad de experto en el ámbito de la comunicación”.
Además, los autores del informe en cuestión indican que Roures fue el empresario que habilitó un centro de prensa desde el que el Govern fue dando el resultado del referéndum ilegal. También queda reflejado que fue Mediapro quien produjo el video 1-0, en el cual “se narraron los acontecimientos relacionados con el referéndum, se enaltecieron a las personas que fueron capaces de hacerlo posible y se difundieron los mensajes que interesaban a la causa independentista”.
Los investigadores afirman que “los máximos responsables del movimiento eran conscientes de que en sus acciones de comunicación juegan un papel fundamental los medios de comunicación social”. “Contar con el soporte de un proveedor de servicios audiovisuales de la entidad Mediapro permitiría difundir el mensaje soberanista a un público mucho mayor”, continúa el escrito.
Por último, la investigación de la Guardia Civil detalla que se produjeron tres llamadas en las que Josep Maria Jové, excargo del Departament de Economía, conversa con diversas personas sobre la supuesta implicación de Roures en el proceso independentista catalán. El informe destaca que dichos soberanistas tenían como objetivo principal crear un “documental que tenía que girar alrededor de todos porque se trataba de hacer un documento para la historia”, en referencia a la posible implicación de Mediapro en el 1-0.
