Entrevistamos al número cuatro de la lista del PSOE a la Asamblea de Madrid, Juan Lobato. Charlamos sobre una mayoría progresista, el modelo de región socialista y el régimen fiscal de Madrid.
PREGUNTA. ¿Cree que el PSOE podrá sumar con el bloque de la izquierda el 4 de mayo?
RESPUESTA. Yo creo que sí, hemos vivido muchos años en los que hemos estado a punto de tener una mayoría progresista en Madrid. Ahora todas las encuestas dan mayoría de derecha, pero por dos o tres escaños. El margen de movilización esta campaña da bastantes opciones de un resultado ajustado. Ojalá el 4 de mayo haya mayoría progresista.
P. ¿Qué consecuencias cree que puede tener que Ayuso revalide la mayoría con Vox? ¿En qué puede afectar al PP y al liderazgo de Casado?
R. Se están moviendo varias placas tectónicas dentro del PP a nivel nacional. Esto es evidente, creo que por la forma que tiene Ayuso de hacer política un poco de espaldas al resto de líderes regionales. Para Madrid las consecuencias son dos. Primero, no aprovechar todo el potencial. Es verdad que cuesta imaginar un Madrid distinto, cuando llevan siendo las cosas iguales tanto tiempo, pero Madrid tiene un potencial enorme para poder funcionar de una forma mucho más dinámica, con una gestión mucho más seria, ordenada y eficaz. La segunda consecuencia es que tenemos un riesgo grande en estas elecciones de que sea la primera que gobierne un partido en la Unión Europea y en la capitalidad de un país tan importante, con posiciones tan radicales como las de Vox. Yo creo que eso es muy malo para la imagen de Madrid y muy malo para la economía madrileña. Estas posiciones radicales de confrontación, de polémicas permanente, lo que genera un rechazo a la inversión y a la atracción de talento, cuando lo que queremos es todo lo contrario.
P. ¿Se está formulando un nacionalismo madrileño?
R. Tiene muchas similitudes con el independentismo catalán, es un modelo en el que en términos de conmigo o contra mí y esto genera una polarización bastante negativa. Puede resultar eficaz electoralmente a corto plazo, como ha pasado en Cataluña o como le ha pasado Ayuso anteriormente en términos de presencia mediática y presencia en redes sociales, muchos memes, mucha crispación, mucha polémica. En el medio plazo es devastador. Tanto el independentismo catalán como Ayuso lo que hacen es enfrentar en vez de tejer alianzas y amplio consenso, que es lo único que permite cambios que mejoren la vida de los ciudadanos. Esa estrategia de confrontación tiene efectos devastadores en la gestión y futuro de la región y también en la vida social de las personas es bastante desagradable. Familias enfrentadas, amigos y vecinos que están en situaciones tan polarizadas, como está forzando Ayuso y como forzaron en Cataluña.
P. ¿Cree que la fiscalidad de Madrid supone un agravio para el resto de comunidades? ¿Es esta la legislatura de la uniformidad fiscal como propone María Jesús Montero?
R. Madrid es la locomotora de España y va a seguir siéndolo desde hace 200 años, desde Carlos III, no desde Ayuso. Eso significa que Madrid tiene que tener ambición por liderar el cambio y la transformación en el país. Eso es lo contrario a lo que hace Isabel Díaz Ayuso, que está en contra del resto de comunidades autónomas, incluso de las gobernadas por su partido. Es la única que vota en contra de los grandes acuerdos en los organismos interterritoriales como el Consejo Interterritorial de Salud Pública. Eso no es bueno para España, pero tampoco es bueno para Madrid. Madrid tiene que aspirar a liberar de grandes consensos y transformaciones. Ayuso es todo lo contrario. Es el personalismo y la posición suya propia frente al resto de comunidades y del Gobierno de España, incluido su propio partido. Esto no es nada bueno. Esperemos que Madrid cambie a esa región líder con capacidades de llegar a acuerdos y aunar posiciones. En cuanto al tema fiscal, lo que está en debate ahora mismo en España y en la OCDE, la Unión Europea es el modelo post-pandémico. Cómo deben organizarse los países occidentales su sistema tributario, sistema fiscal y financiero para tener una gestión eficaz y una economía sostenible y estable. En ese debate tenemos que participar todos.
P. ¿Eso es compatible con la negativa, por ahora, de Ángel Gabilondo a subir impuestos?
R. Sí. Una cosa es el debate profundo sobre el modelo fical que, evidentemente, no lo va a decidir Madrid porque tiene que ser la OCDE y el Banco Mundial los que marquen el camino; y otra bien distinta es lo que necesita Madrid en la situación actual y en los dos años que vienen por delante, dos años post-pandemia en los que no hay ningún encaje para subir impuestos. Es una situación imposible en la que no le vendría bien a la economía, ni a los servicios públicos ni a los madrileños. No es posible en términos económicos plantear una subida impuestos en una situación de crisis post-pandémica, ni una política procíclica disparatada en términos económico. Así lo dijo la ministra Calviño con contundencia. Es absurdo que en un momento de crisis económica se suban impuestos. Otra cosa es el modelo que se destine a medio plazo que sí que tenemos que decir a qué consenso general llegamos de qué estructuras impositivas son las más eficaces que generen igualdad de oportunidades de mercado y competencia.
P. ¿Hace unos días se hizo viral un vídeo en el que explicaba cómo la bajada de impuestos que Vox presumía haber conseguido de Díaz Ayuso, ¿Hace falta hacer pedagogía en la izquierda con este tema?
Explicación en 1 minuto de la NO bajada de #impuestos para todos del pacto #PPVox en #Madrid#Debateeconomico #4M #Gobernarenserio pic.twitter.com/LgTPI1xe57
— Juan Lobato (@juanlobato_es) April 18, 2021
R. Sí, es muy fácil decir que se bajan los impuestos a todos y eso queda ahí como como titular. Se dice en siete u ocho segundos y todo el mundo parece que lo interioriza rápido: “Si yo gano 1.000 euros al mes y me bajan los impuestos, mejor”. La realidad es que no paga prácticamente impuestos y le va a suponer de bajada 2 euros y, al final, no va a tener ninguna utilidad para su calidad de vida. Mientras, unos servicios públicos de calidad le van a ahorrar tener que estar pagando un seguro sanitario o tener un colegio con mucha más protección o tardar dos meses menos en operarte de una cardiopatía, porque hay más recursos en el sector público. Esa pedagogía es muy importante hacerla. Es verdad que es complejo porque los impuestos son temas que cuesta explicar. Por eso ese video tuvo ese impacto tan importante. Tratamos ahí de explicar de una forma muy concreta y didáctica el efecto de esta bajada de impuestos que han pactado PP y Vox que para el 92% de la población madrileña le baja entre 0 y 10 €. Hay esa imagen de que se les baja a todos, pero solo tres euros y eso no tiene un efecto.
P. ¿Por qué deberían votar los jóvenes al PSOE? ¿Qué medidas proponen?
R. Lo que necesitamos los jóvenes es una expectativa de futuro. Madrid de aquí a veinte años sea una región mejor, más ambiciosa y que va a tener el hambre por hacer cosas distintas y mucho más innovadora. Esto es lo primero que falta en Madrid desde hace 25 años que lleva gobernando el PP. No hay un modelo de región. No hay nadie está pensando en el Madrid dentro de 20 años. Lo más parecido a modelo de región que hemos oído ha sido ser el casino de Europa con el proyecto de Eurovegas.
Estamos poniendo sobre la mesa ese Madrid que queremos: aprovechar todo ese potencial. Es la conexión de Europa con América Latina, una región con red aeroportuaria, de carreteras, con 17 universidades, tres de los centros de negocios más importantes del mundo. Madrid no tendría que ir bien, tendría que ir muy bien, si tuviera claro un modelo de región al que llegar dentro de 10, 15 o 20 años, que apostara por la tecnología, por la innovación, por la economía del conocimiento como pilares. Querer ser una atracción de talento mundial. Tendríamos que ser el Singapur de los derechos sociales, y tenemos potencial para serlo. El tema es tener el hambre y la ambición de lanzarse a eso. Tenemos toda la materia prima para hacerlo, teniendo claro ese modelo. Decir que Madrid quiere ser el referente mundial de la innovación y conocimiento y la tecnología y mejor que aquí no se vive en ningún lado. Cuando un CEO decida donde instala su empresa que piense en Madrid como ese lugar que tiene ganas de conectar gente y de meter dinamismo. Yo creo que eso es lo que los jóvenes necesitamos: ser ese polo de atracción mundial y no irnos a currar a Singapur o Chicago.
P. Vemos que usted sí utiliza las redes para comunicarse, pero hay otros políticos como Ada Colau que han abandono Twitter, ¿Qué le impulsa a usarlas?
R. Es un medio más para hacer pedagogía sobre todo en un mundo tan mediático y tan dinámico es muy difícil por los medios tradicionales llegar a trasladar tus propuestas, para lo que estás en política. Las redes sociales son un medio más. Es verdad que hay un nivel de intoxicación enorme en algunas redes sociales con cientos de miles de perfiles falsos que contestan como como robots con mensaje. Hay cierto margen para llegar una población que de otra forma no tendría acceso a esa información. Hay que estar y hay que dar la cara y hay que estar también abiertos. Son un medio muy útil de comunicación bidireccional. En Instagram en los vídeos en directo que haces los usuarios te pueden ir preguntando sobre la marcha. Eso es absolutamente transparente y bastante dinámico. Creo que los políticos deben dar la cara y estar sometidos al escrutinio ciudadano para demostrar también las convicciones de nuestras ideas y los compromisos que asumimos.
