Solo dos días antes del cierre de campaña entrevistamos a Diego Gago, número dos del Partido Popular por Pontevedra al Congreso. El presidente de Nuevas Generaciones es de vocación política temprana. Se afilió a un proyecto del que se sigue enorgulleciendo y al que ha servido como portavoz del Grupo Parlamentario Popular de la Comisión de Cambio Climático. El próximo domingo puede revalidar su escaño.
PREGUNTA. ¿Qué te han parecido las estimaciones de voto que ha hecho el CIS y otras encuestas al PP?
RESPUESTA. Nosotros ya hemos observado el cambio de la gestión del CIS de cuando gobernaba al PP a cuando lo hace ahora el PSOE. Cuando una gran mayoría de encuestas vaticinan una determinada horquilla de escaños y el CIS aporta un resultado radicalmente distinto, a nosotros no nos parece una casualidad justo cuando estamos a unos días de las elecciones.
P. ¿Qué te motivó a ir en las listas de tu partido, teniendo en cuenta el desprestigio de la política actual?
R. Desde hace 15 estoy afiliado al PP. Es una cuestión de vocación, casi desde que nací. Desde adolescente, he sentido inquietud por las preocupaciones de la gente de mi edad, el empleo, la economía. Además, vi como el PP afrontaba los grandes retos de esa época.
P. Serán elegidos 350 candidatos para el Congreso ¿Qué crees que puedes aportar tú a la política? ¿Y tu partido?
R. Creo que es importante que los jóvenes, además de tener una educación y experiencia en la empresa privada, tengan inquietudes políticas, y aporten desde dentro de la política sus opiniones y sugerencias. Mi partido cuando gobernó, hasta que Sánchez nos echó del poder, tuvo que hacerlo en una situación muy difícil y consiguió que España creciera, liderando el crecimiento europeo, parar la sangría de paro, consolidar el pago de los servicios básicos como sanidad, pensiones y educación.
P. ¿Te preocupa que la gente no vaya a votar el 10 de noviembre?
R. Claro. Tras varios procesos electorales, es normal que se pierda la credibilidad en la política. Si no vamos a votar, pasará más de lo mismo: no podemos cambiar las cosas si no emitimos nuestro voto, sea al partido que sea. Hay que volver a situar a España en la normalidad institucional, en el crecimiento económico y consolidación de servicios públicos.
P. Elige tres desafíos que tenga España que sean para ti los más importantes y una solución para cada uno.
R. El paro. La mejor política social es general empleo. Si uno tiene recursos económicos es más libre y puede decidir mejor. El segundo desafío son las pensiones. Con el desequilibrio demográfico y las dificultades que tenemos para continuar con el modelo tal y cómo lo conocemos, vamos a tener un problema para mantener las pensiones. También me preocupa el medioambiente y el cambio climático. Hasta hace muy poco tiempo no había la suficiente concienciación social sobre la necesidad de preservar el mundo. Nuestra actividad diaria está acelerando el cambio climático. Me preocupa bastante. He tenido la suerte de ser el portavoz de mi grupo parlamentario en la Comisión de Cambio Climático en el Congreso y esta es una batalla de todos.
P. ¿Crees que será posible el entendimiento el 11 de noviembre?
R. Sí, es fundamental tener un gobierno estable. Hace un año y medio nosotros estábamos en el gobierno, y hemos sido capaces de aprobar lo más elemental: los Presupuestos. Llegamos a acuerdos con los demás partidos políticos y una semana más tarde, Sánchez, apoyado por todos los partidos que no creen en nuestro modelo de Estado, nos ha echado del gobierno. Sánchez ha sido incapaz de llegar a acuerdos con sus socios preferentes. Nosotros le propusimos, a pesar de no abstenernos porque no estamos de acuerdo con sus políticas, apoyarle en 11 pactos de Estado.
P. ¿Qué debe hacer el PP con el conflicto catalán?
R. Si estuviéramos en el gobierno hay varias medidas que tomaríamos: aplicar la Ley de Seguridad Nacional, para que FCSE no se vean coaccionadas por líderes autonómicos independentistas y no puedan garantizar la seguridad en Cataluña. Aprobaremos una ley de símbolos para que no se puedan cometer actos como ondear una bandera inconstitucional en edificios públicos. También lucharíamos contra el modelo autonómico catalán que no permite elegir a los padres en qué lengua pueden sus hijos cursas las asignaturas y contra la manipulación en los medios públicos.
P. ¿Qué propuestas podría llevar a cabo NNGG con la situación de los universitarios en Cataluña?
R. Nuestros compañeros de NNGG en Cataluña son héroes por lo que están viviendo. Tenemos presencia también en S’Acabat, y estamos apoyándoles. Hemos estado en la universidad con Cayetana Álvarez de Toledo para explicarles a los alumnos que no van a estar solos. Las ideas que damos para revertir la situación en Cataluña son bien acogidas entre los alumnos.
P. Si estuviera en tu mano que no fuéramos a terceras elecciones, ¿Haríais presidente a Sánchez?
R. Veremos el resultado electoral. Tampoco es coherente dar el gobierno a alguien que es incapaz de sacar adelante ninguna iniciativa. Estamos aspirando a ser la fuerza mayoritaria, porque sí estamos en condiciones de poder llegar a acuerdos. Tendremos que ver cuál es el programa político del señor Sánchez.
P. Los españoles cada vez tienen menos confianza en sus representantes y tú aspiras a serlo, ¿Cuáles serían las cualidades que debe tener un buen político?
R. Honestidad, transparencia y que el interés general esté por encima de los intereses partidistas. El ejemplo concreto de lo que no se debe hacer es lo que ha hecho el señor Sánchez. El PP tenía un gobierno estable y el señor Sánchez, por una investigación judicial, se apoyó en los partidos independentistas y populistas para echar al PP. Sánchez no ha aportado nada bueno a nuestro país.
P. Se comenta que entre sus señorías hay muy poco nivel o al menos, no tanto como en la década de los 80 y 90, ¿Qué opinas?
R. Cuánto mayor sea la preparación de un candidato, mayor será su conocimiento de los problemas de España. Es importante que haya gente joven y listas con equilibrio entre personas con gran experiencia en la Administración y en la empresa privada. En cuanto a la oratoria, que es importante, soy más de ser bueno haciendo que diciendo. Es más importante las cuentas que los cuentos.
P. Quédate con un personaje histórico, ¿Por qué?
R. Cristóbal Colón. Nosotros decimos que es español porque no hay nada que diga que no lo es. El descubrimiento de América cambió el mundo.
P. Un político de ahora y de antes.
R. De ahora me quedo con dos. Pablo Casado porque representa la regeneración y un proyecto de país ambicioso, que quería una parte muy importante de mi generación y de mi partido. Alberto Nuñez-Feijó, porque me parece el político en activo cuya gestión está más que auditada. Para mí es un ejemplo a seguir. De antes, Adolfo Suárez, que dio carpetazo a 40 años de dictadura para abrir la etapa democrática.
P. ¿A qué se debe aspirar la política: a la utopía o al pragmatismo?
R. Es bueno tener ilusiones, pero no podemos vivir de ellas. El pragmatismo impera. Podemos aspirar a tener más población que China, pero no es posible.
