La belleza se ha convertido en una de las principales preocupaciones del sector poblacional y de ello surgen miles de tratamientos como este a base de dióxido de carbono para producir colágeno y elastina en la piel.
La carboxiterapia es un tratamiento médico no invasivo que implica la inyección de dióxido de carbono (CO2) en el tejido subcutáneo con el objetivo de mejorar la circulación sanguínea y linfática, lo que estimula la producción de colágeno y elastina. El procedimiento consiste en insertar una pequeña cantidad de dióxido de carbono en la capa subcutánea de la piel con una aguja fina disolviendo rápidamente en el tejido, mejorando la celulitis, la grasa localizada, y aumentando el flujo sanguíneo.
Expertos de Alfa Clinics afirman que “Este tratamiento se utiliza comúnmente para abordar problemas estéticos como la celulitis, la flacidez de la piel, las arrugas y las estrías. También puede ser una opción efectiva para tratar problemas médicos como la mala circulación, el dolor muscular y la cicatrización de heridas”.
El número de sesiones necesarias depende del problema y la respuesta individual del paciente, generalmente se recomiendan entre 6 y 10 sesiones a razón de una o dos veces por semana. Aunque la mayoría de las personas no experimentan dolor durante el tratamiento, algunas pueden sentir una leve sensación de pinchazo o presión durante la inyección del CO2, mientras que otras pueden experimentar un dolor más intenso.
Tratamientos complementarios
Además, la carboxiterapia se puede combinar con otros tratamientos médicos y estéticos para lograr resultados más efectivos y duraderos, generalmente aquellos que tienen objetivos similares o complementarios. Entre ellos destacan los siguientes:
- Radiofrecuencia: las ondas electromagnéticas calientan las capas profundas de la piel y estimulan la producción de colágeno y elastina. La combinación con la carboxiterapia puede mejorar los resultados en el tratamiento de la flacidez y las arrugas.
- Mesoterapia: un tratamiento en el que se inyectan medicamentos, vitaminas y otros compuestos activos en la piel para tratar problemas como la celulitis, la flacidez y las arrugas. La combinación de la mesoterapia con la carboxiterapia puede mejorar aún más los resultados para el tratamiento de la celulitis y la flacidez.
- Tratamientos láser: los tratamientos con láser, como el láser fraccionado, el láser vascular y el láser para el rejuvenecimiento de la piel, se pueden combinar con la carboxiterapia para mejorar la apariencia de la piel en general.
- Criolipólisis médica: un tratamiento no invasivo que utiliza frío para eliminar la grasa localizada.
Es importante mencionar que la combinación de tratamientos debe ser evaluada por un profesional médico capacitado y experimentado, y que la selección de los tratamientos adecuados depende de las necesidades y objetivos específicos de cada paciente.
