Cuando llegó Pacheta, la SD Huesca se encontraba última clasificada, a seis puntos de la salvación, y estaba -casi- desahuciada.
Tras ganar al Elche en El Alcoraz, y salir del descenso cinco meses después, los oscenses perdieron en Mendizorroza ante el Deportivo Alavés. Pero la gran remontada del cuadro dirigido por el técnico burgalés hace que, aún así, permanezcan fuera del descenso y con opciones de permanencia, algo que parecía impensable hace unos meses.
Vuelve la ilusión
La temporada no comenzó bien para el equipo aragonés. Le costó un mundo ganar un partido, el primer triunfo no llegó hasta la jornada 13 frente al Alavés, y eso significó que los rivales directos se le alejaran. Hasta el punto de que la salvación parecía prácticamente descartada. Después, otros cinco partidos sin los tres puntos, lo que se llevó por delante a Michel, héroe del ascenso.
Así, llegó José Rojo Martín “Pacheta” para darle la vuelta a la tortilla y volver a creer en una salvación que estaba cuesta arriba. Desde su presentación, ilusionó a la afición azulgrana; pero en el campo se la ganó de verdad. Y es que, en sus ruedas de prensa, imparte cátedras y, en Huesca, desde el primer día, devolvió la ilusión perdida al aficionado azulgrana con su mensaje motivador: “Que se preparen, que nos esperen”.
Cambio de mentalidad
El ex entrenador del Elche le cambió la mentalidad y la manera de competir al cuadro oscense. Puso tres centrales para liberar, así, a Javi Galán y Maffeo. En la portería, sustituyó la juventud de Álvaro Fernández por la experiencia de Andrés. Y, además, construyó el contexto ideal para que Rafa Mir explotase sus cualidades. A partir de ahí, creció en defensa, en ataque y, sobre todo, en lo más importante, los resultados.
Ha formado un equipo maduro, que tiene muy clara su idea de juego y que sabe cómo gestionar el tiempo en cada momento del partido. Es decir, por fin se ha convertido en un equipo que de verdad compite con una buena base en Primera División. Y, pase lo que pase de aquí a final de temporada, Pacheta ha conseguido lo que ya avisó, que los aficionados de la SD Huesca se sientan orgullosos de su equipo. Y, con ello, el equipo aragonés está más cerca que nunca de, esta vez sí, conseguir el objetivo de volver a estar un año más compitiendo en la élite del fútbol español, compitiendo en Primera División.
