Funzo & Baby Loud pasaron por Vigo con su gira de despedida y ofrecieron un último concierto que enloqueció y emocionó al público
Funzo & Baby Loud regresaron a Vigo para despedirse de su público con un último concierto. El dúo alicantino hizo parada en la ciudad con la gira NCPS (Negative Cloud Pa Siempre). Ante un Auditorio Mar de Vigo repleto hicieron un repaso por su discografía y regalaron a los asistentes un concierto más especial de lo esperado aunque con sabor agridulce.
Calentamiento antes de la locura
El Auditorio Mar de Vigo se convirtió el sábado 16 de marzo en una discoteca mientras se acomodaban en las butacas los últimos asistentes. Una sesión DJ de unos 20 minutos amenizó la espera. A golpe de hits Jaime consiguió poner en pie al público y hacerle gritar, bailar y saltar.
Los asistentes estaban impacientes por ver a Funzo & Baby Loud y varios de ellos llevaron pancartas con mensajes de cariño y admiración. A las 21:15 horas una proyección recordando los últimos directos del dúo y una cuenta atrás marcaron el inicio del concierto. El dúo de hermanos entró en el escenario al ritmo de Palante, canción que da título a su último disco.
El último concierto en Vigo
«Bienvenidos al último concierto nuestro. Lo decimos para que realmente estéis presentes aquí, para que disfrutéis. No hay que estar tristes, hay que dar toda la energía que tenemos», señalaban Funzo & Baby Loud.
El público se implicó desde el principio en el espectáculo y demostró conocer todas las canciones cantándolas a pleno pulmón. Incluso en temas como To’ buena vibra se escuchaba más a los asistentes que a los artistas.
La euforia se desató. El público se desprendió de las butacas y mantuvo la energía durante la hora y media que duró el concierto. Gritos, saltos, palmas y también lágrimas.
Cercanía con el público
Funzo & Baby Loud se mostraron muy cercanos con el público, paseándose por el borde del escenario. Interactuaron con los asistentes con sondeos para conocerles mejor e incluso recogieron regalos como una bandera de Galicia que colgaron en la mesa del DJ.
Además, retaron al público para ver cuántas canciones conocían de un mashup en el que incluyeron temas como Andrómeda, Como hermanos y Remember. Los asistentes pasaron el examen dejándose la voz en todas.
El dúo aprovechaba los títulos de las canciones para introducir de manera original algunos de los temas. Para dar paso a Malibú con piña llamaron a un camarero y para Alicantina preguntaron si había alguien de Alicante en la sala. «Si vosotros os reventáis la garganta con esta canción nosotros reventamos la ciudad«, señalaron para presentar Reventar la ciudad.
Momentos emotivos
El concierto tuvo sus momentos de intensidad y emoción. Los asistentes hicieron brillar el Auditorio Mar de Vigo con las linternas de sus móviles para acompañar ¿Dónde te espero?, canción que empezaron interpretando a capela con el público, e Interestelar.
Otra canción especialmente emotiva fue El poema. Funzo & Baby Loud animaron en mitad del tema a los asistentes a darle un abrazo a la persona con la que habían ido al concierto y decirle «te quiero». Ellos se fundieron en un abrazo de hermanos.
Sabor agridulce
El concierto prometía ser especial al tratarse del último de Funzo & Baby Loud como dúo, pero lo fue aún más. La situación superó a Funzo, que abandonó el escenario de manera inesperada después de cantar Nazario.
Tras una breve pausa volvió a salir para explicar lo ocurrido y sincerarse con el público. «Tengo un poquillo de ansiedad y a veces cuando me pongo a cantar se me dispara mucho y me cuesta bastante», confesaba. Aguantó dos canciones más, Huracán y Contra todo(s), y volvió a salir del escenario.
Baby Loud se quedó solo y pidió al público cantar Canción de pop para enviarle fuerzas a su hermano. La buena energía le llegó y regresó. Pidió perdón, aseguró que hacía tiempo que no le pasaba y prometió «intentar estar bien» lo que queda de concierto. Tras interpretar Poca suerte los asistentes mostraron su apoyo a Funzo coreando su nombre.
Fiesta de despedida
Funzo & Baby Loud se fueron del escenario y regresaron para despedir la cita con una gran fiesta. Reaparecieron al ritmo de PUM, cuyo remix revolucionó al público.
En el repertorio se coló el Cumpleaños feliz para felicitar a los asistentes que estaban de aniversario y ello dio pie a introducir la siguiente canción. «Si os lo proponéis vais a poder ser jóvenes para siempre», señalaban antes de interpretar Joven para siempre.
Batmóvil e Inmortales pusieron el broche de oro a un concierto que hizo vibrar al Auditorio Mar de Vigo. Funzo acabó llorando y todo el equipo se fundió en un abrazo mientras el público coreaba su nombre y repetía el himno Negative Cloud Pa Siempre.
