Analizamos 5 de los cortometrajes proyectados en el Festival de Málaga, entre los que se encuentran «Europa» y «El ruido solar».
Lucas del Fresno sabe utilizar los silencios cuando habla y cuando dirige películas. Mira al fondo de la sala 2 del Cine Albéniz mientras explica de qué va su corto. Se calla unos segundos. “De la empatía”, remata. Hoy se proyectan aquí este y cuatro cortometrajes más dentro de la Sección Oficial del Festival de Cine de Málaga. Viajamos con ellos por medio mundo y los analizamos.
A Girl in a Fortress
Dirigido por Erik Morales y distribuido por Selected Films, este corto nos lleva hasta India. El director no ha podido asistir a la proyección, pero sí su productora, Inés Massa. “Queríamos evocar mitología”, cuenta. Y lo han conseguido a la perfección. La protagonista, Radha, tiene 30 años y vive en un palacio con su marido e hijos. Pese a llevar una vida tranquila, se siente prisionera por la presión que la tradición ejerce sobre ella como mujer. La única manera que tiene de sentirse feliz es escapándose a través de su imaginación a los recuerdos que tiene con Krishna.
A Girl in a Fortress (“Una chica en una fortaleza”) es el primer paso que da Erik Morales en la ficción. Sus otros trabajos, también cortometrajes, han sido documentales. Con este corto evoca a lo espiritual, lo poético y lo onírico. Es luminoso y místico.
El Màrtir
Su director, Fernando Pomares, nos lleva a un campamento de refugiados en Siria para enfrentarnos a una realidad terrible. Lina tiene una hija, y sus hermanos Jammal y Khaled cruzan la frontera para entrar en un país occidental. A Khaled le disparan en el paso fronterizo, y Jammal hace todo lo posible por llevarlo consigo durante el resto del viaje. “Mi infancia fueron vuestras manos”, dice Lina. Es un corto crudo, asfixiante, contenido, con la muerte presente pero de manera silenciosa.
Europa
En el XXI Festival de Cine de Sant Joan de Alicante Lucas del Fresno se hizo con dos premios gracias a Europa: Ficus de Oro a Mejor Obra y Ficus de Plata a Mejor Dirección. El protagonista de esta historia es Pedro, inmigrante en Suiza. Su trabajo consiste en llevar a una vaca (Europa) al matadero. Su hermano le insiste en que viaje a España para acompañar a su madre en sus últimos días. Cuando llega al matadero, ya está cerrado. En solo 26 minutos, Lucas consigue hablar sobre el desarraigo, la soledad y la pertenencia.
El ruido solar
Ganador de premios en diferentes festivales y habiendo proyectado sus películas en Rotterdam, Sevilla y Gijón, Pablo Hernando trae en El ruido solar una colección de historias sobre personas que tuvieron una visión fugaz del futuro después de un evento cósmico que nadie es capaz de explicar. Visiones del futuro contenidas en un fogonazo que ciegan a todos los seres vivos del planeta y les hace ver algo diferente: películas proyectadas en el cerebro, fábricas de queso con leche humana, guerras, churrerías, asesinatos o un himno de España que nunca termina. Nadie es capaz de digerir lo que ha visto ni sabe qué hacer con esa información.
Un relato futurista sin las pretensiones morales de Black Mirror (y con Ingrid García Jonsson en el reparto) que ha conseguido la Biznaga de Plata a la Mejor Dirección en el Festival de Cine de Málaga. Se podrá ver de forma gratuita en el Festival Internacional de Cine de Huesca hasta el 19 de junio a través de este enlace.
No Voice
“Trata sobre la incomunicación”, dijo su director, Jiajie Yu Yan, antes de la proyección. Ha realizado su primer largometraje (Tres edades) en el Programa de Desarrollo en las Residencias de la Academia de Cine con mentores como Isabel Coixet, Carla Simón o Fernando León de Aranoa. Con el cortometraje No Voice cuenta la historia de una hija que se muda a 540 kilómetros de su madre, que espera noticias suyas. Es un relato nostálgico e inquieto, que consigue hacerse entender sin diálogos.
Después de las proyecciones no hay preguntas y respuestas. “Una pena… pero siempre es una buena sensación que la película llegue a la gente”, dice Lucas a través de Instagram.