Hoy en día todos hemos oído hablar sobre un administrador de fincas. Es muy probable que incluso en nuestra comunidad de vecinos tengamos uno que se encargue de todos los asuntos de esta comunidad. Pero, ante las dudas, ¿Qué es un administrador de fincas? ¿O un administrador de fincas en Valencia?
El administrador de fincas es conocido como el administrador de comunidades de vecinos o gestor de fincas. Se trata de un profesional titulado que puede estar colegiado o no y que tiene como principal objetivo gestionar fincas rústicas o urbanas tanto a nivel financiero como a nivel legal y económico al fin de velar por el buen funcionamiento de la misma.
La figura de los administradores colegiados de fincas es indispensable dentro de todo tipo de propiedades tal y como es recogido en la Ley de Propiedad Horizontal. Estas son las personas encargadas de resolver todos los problemas. Ninguna comunidad de vecinos se salva de problemas, conflictos o desencuentros de posturas. Estos problemas deben ser gestionados por personas con experiencia en el área, bien sea económica o legal.
Las tres funciones principales que todo administrador de finca debe realizar son: la administración, la legalidad y la económica. La administración es todo aquello relacionado con la gestión de las juntas la gestión de documentos, el control de gastos, cobros, contratos con el personal, entre otras tantas situaciones derivadas de la administración de propiedades, incluyendo a los servicios, las reparaciones y demás obras. Respecto a la legalidad se encarga de gestionar las subvenciones, juicios monitorios, asesoría legal a cada uno de los propietarios, y la realización en representación de los propietarios de muchos trámites ante las instituciones públicas, permitiendo que se cumpla con las normativas vigentes en materia de propiedades.
Respecto a los asuntos económicos, se encarga de velar que la gestión sea eficiente y óptima. Contar con un administrador de fincas profesional asegura que los resultados financieros serán siempre óptimos, al tiempo que la ejecución de obras será constante, de acuerdo a la realidad presupuestaria y a las necesidades.
A la hora de contratar un administrador de fincas, hay que tener en cuenta una serie de requisitos. Antes de nada, hay que destacar que contar con uno nos permitirá ahorrar en costes de forma significativa, ofrece seguridad y tranquilidad a los vecinos y mejoran la convivencia.
Todo administrador de finca debe tener una titulación adecuada que asegure que es de fiar. Es recomendable que este tenga experiencia en el sector para así le resulte más rápido solucionar los problemas ante cualquier situación. Este debería ofrecer un trato personalizado, deberá ser transparente y honrado como capaz de gestionar todo tipo de situaciones, principalmente aquellas que causen un gran estrés.
