La Unión Europea ha alcanzado un acuerdo con BioNTech y Pfizer para adelantar al segundo trimestre la entrega de 50 millones de dosis a los Estados miembros. Esta distribución estaba prevista para finales de este año.
La Comisión Europea ha conseguido pactar un servicio exprés tras las dudas con la vacuna AstraZeneca y la suspención de los envíos de Johnson&Johnson por los casos de trombos. Así lo ha anunciado esta mañana la presidenta Ursula von der Leyen: «Puedo anunciar que hemos llegado a un acuerdo con BioNTech y Pfizer para acelerar la entrega de 40 millones de dosis, que serán distribuidas en el segundo trimestre».
La alemana ha destacado en su discurso que en las últimas semanas la UE ha acelerado la campaña de vacunación. «Estamos en una carrera contra el tiempo, pero las buenas noticias son que el ritmo de vacunación se está acelerando en Europa. Los Estados miembros han recibido más de 126 millones de dosis y me hace feliz poder decir que hoy hemos logrado superar el umbral de 100 millones de vacunados. Un hito del que estar orgullosos. Más de un cuarto de ellos son dos dosis, así que tenemos 27 millones completamente vacunados en la UE», ha sentenciado.
Como se ha hecho hasta ahora, las 50 millones de unidades serán repartidas entre los Estados miembros en base a su población. A España le corresponderían alrededor de cinco millones. Von der Leyen ha afirmado que estas nuevas dosis «ayudarán sustancialmente a consolidar el desarrollo de las campañas de vacunación».
La presidenta de la Comisión Europea ha agradecido a las compañías farmacéuticas el esfuerzo realizado y las ha remarcado como «socios fiables». Bruselas ya está negociando con la misma empresa una nueva compra de su vacuna contra la COVID-19 para cubrir futuras necesidades del bloque. De esta forma, la UE consolida un socio preferente frente a las demás empresas.
«Tenemos que centrarnos en tecnologías que han demostrado su valía y las vacunas de ARNm son un ejemplo claro», ha defendido Von der Leyen. Sin embargo, la alemana no ha descartado la apertura de negociaciones con otras farmacéuticas.
La UE pretende adquirir concretamente 1.800 millones de dosis en los años 2022 y 2023 con el objetivo de «reforzar y prolongar la inmunidad», así como para contener nuevas variantes del virus que puedan surgir.
