Desde la comunidad se ha hecho alusión a la presencia de expertos internacionales que validen el estado del monumento ya que, como aseguran, está bien conservado y no tienen intención de cubrirlo por el momento.
Hasta 2023 no se empezará a hablar del Templo de Debod. Hace meses se habló de su posible reubicación o de cubrirlo. Sin embargo, ahora este tema se ha pospuesto, ya que desde el Ayuntamiento se dice que “no existe riesgo de destrucción inminente”.
Se asegura que “está bien conservado” y que por ello no van a actuar por el momento en este lugar. Luis Lafuente, director general de Patrimonio Cultural del Consistorio, fue el que aseguró el buen estado del monumento, diciendo además que no requería de “acciones inmediatas”. No se descartan posibles actuaciones en el futuro, pero sí que pretenden esperar al consenso nacional e internacional para seguir avanzando en este punto.
Frente a todo ello hay que recordar la visita que se produjo hace un par de años, en 2020, por parte del exministro de Antigüedades de Egipto, ya que aseguró que su estado era malo y que había sufrido “más que en sus 2.000 años de vida”. Fue en este momento cuando Zahi Hawaas dijo que debía protegerse y que, si no se valoraba, podían volver a reclamarlo para llevarlo a Egipto.
Un año después se empezaron a hacer estudios en el templo para valorar su resistencia y otras características. Se determinó que no había “patologías que presenten motivos de preocupación” por el momento.