Soraya Rodríguez, diputada del PSOE, no descarta irse a Ciudadanos. Los medios de comunicación ya dar por hecho su incorporación en las listas de C’s a Europa.
Soraya Rodríguez ha anunciado hoy su baja como militante del PSOE tras 37 años en sus filas, por su «grave falta de sintonía con la Ejecutiva Federal del PSOE» de Pedro Sánchez. La diputada había sido bastante crítica con la posición de diálogo del Gobierno con los independentistas catalanes. Tuvo su mayor distanciamiento con el Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso tras la creación de la mesa de partidos y la polémica del ‘relator’.
Los tiempos han sido lo más criticado en los medios de comunicación ya que parecen encajar con una estrategia ya conocida. Anuncia hoy su baja del PSOE tras meses criticando a la dirección y dentro de unos días, Ciudadanos -que ya ha alabado la trayectoria de la exsocialista- anuncia su fichaje estrella. Uno más al que ya se sumó la expopular Silvia Clemente. Rodríguez podría ir tras Luis Garicano, del ala más socialdemócrata, a las elecciones europeas.
Rodríguez ha ocupado altos cargos en el Partido Socialista durante su trayectoria. Fue secretaría general del PSOE de Castilla y León y portavoz del Partido Socialista en el Congreso. También ocupó la secretaría de Estado de Cooperación Internacional en el segundo mandato de Zapatero y en esta última legislatura presidió la Comisión Mixta de la UE y fue miembro de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa, y miembro de la Diputación Permanente hasta que la dirección del PSOE la destituyó.
La exsocialista fue una de los máximos apoyos de Susana Díaz en las primarias de 2017. Desde entonces, se ha vuelto especialmente crítica con la dirección de Sánchez. Especialmente duro fue su enfrentamiento con la número dos de Pedro Sánchez y vicesecretaria general de PSOE, Adriana Lastra, en una reunión del Grupo Parlamentario Socialista tras la pérdida de la Junta de Andalucía en la que tuvo una línea bastante dura contra la dirección del PSOE.
Sánchez no le ha pedido volver al Congreso, y ella no ha solicitado volver. Incluso reuniones de agrupaciones locales de Valladolid habían pedido su expulsión del PSOE tras la animadversión de Rodríguez con Pedro Sánchez. Cabe mencionar que Castilla y León es uno de los -pocos- bastiones sanchistas.
A pesar de que la noticia no ha sorprendido en Ferraz, si han calificado de «vergüenza» la forma de proceder de la exsocialista.
