Logroñés y Albacete se vuelven a ver las caras en segunda desde hace 20 años.
Si el fútbol son estados de ánimo, nos encontramos con la cara y la cruz. La cara es el Logroñés, que encadena 5 victorias consecutivas y está empatado a puntos con el Rayo, equipo que marca el Play Off de ascenso, incluso con un partido menos. La cruz, un Albacete que lleva 5 jornadas sin ganar, un equipo falto de ideas en ataque y flojo en defensa. Moneda al aire. Veremos a qué lado cae.
Felicidad en Las Gaunas
Después de 20 años, el Logroñés está viviendo uno de los momentos más dulces de su historia. Séptimos, casi en Play Off y con una racha de victorias impresionante. Y es curioso, ya que todas estas victorias han sido por la mínima y 4 de ellas sin encajar goles. Esto habla muy bien de la defensa riojana y de la efectividad de sus delanteros.
El conjunto de Sergio Rodríguez viene de conseguir una victoria en el Heliodoro Rodríguez López ante un Tenerife en horas bajas. Hubo momentos que parecía que el recién ascendido era el conjunto canario.
El Logroñés cuenta con un partido menos y está a las puertas de los Play Off. Esperan mantener esta inercia positiva y hacer de Las Gaunas un fortín.
Necesidad de sumar
Ya son 5 partidos sin sumar de 3 y el nerviosismo se apodera de la afición manchega. El equipo está penúltimo, es cierto que a tan solo 1 punto de salir del descenso, pero para ello hay que empezar a ganar.
El Albacete viene de una derrota ante el Almería. Hubo tramos del partido en los que el Alba pudo ganar, pero cuando llegan al área rival se le nublan las ideas. Si a eso le sumas los despistes en defensa, te da como resultado una nueva derrota.
Sin embargo, el equipo cree en que pueden darle la vuelta a esta situación y todo pasa por llevarse los 3 puntos de Las Gaunas.