El conjunto catalán resistió a las sacudidas de los hombres de Zinedine Zidane y diecisiete años después «El Clásico» se quedó sin goles
Casi dos meses después, el encuentro entre Fútbol Club Barcelona y Real Madrid, por fin, se ha jugado. Pero bien es cierto, que en esta ocasión, no será un encuentro recordado por lo acontecido dentro del campo.
Bajo los acordes del himno del Barça, entonados por los más de 93 mil espectadores que llenaron el estadio, saltaron los jugadores al campo.
La primera gran aproximación de peligro al área rival estuvo en los pies del equipo local. Leo Messi vio el desmarque de Jordi Alba y con un balón largo dejo solo al defensa de Hospitalet que puso en centro al área al que Luis Suárez no pudo llegar.
Pero todo fue un espejismo, porque a partir de ese momento todo fue un acoso y derribo por parte del Real Madrid que no dejaba al Barcelona salir de su área y tras un saque de esquina Gerard Piqué, bajo los palos, rechazó un cabezazo de Casemiro que ya se colaba dentro de la portería culé.
En este momento se produjeron las jugadas más polémicas del encuentro ya que, en ese despeje de Piqué, el balón le cayó a Raphael Varane que cuando se disponía controlar el balón dentro del área recibió un plantillazo de Clement Lenglet que le dejó los tacos marcados en el muslo.
La jugada acabó en un saque de esquina, que de nuevo, se vio envuelto por la polémica ya que, en el lanzamiento del mismo, Ivan Rakitic agarró de la camiseta a Varane y derribo al jugador dentro del área, pero, tras revisar las dos jugadas en el VAR, Hernández Hernández mandó continuar.
El conjunto blanco se hizo con el domino del partido a base de una gran presión alta que impidió que el conjunto catalán sacara con limpieza el balón y le obligó a jugar balones en largo.
Esto hizo que hasta el minuto 30 el Barcelona no tuviera una gran oportunidad de gol. Tras un gran centro desde la banda izquierda, Courtois evitó un remate de Sergi Roberto, pero el balón le cayó a Leo Messi que remató, pero Sergio Ramos acabó despejando bajo los palos.
A pesar de que el Madrid tuvo dos grandes ocasiones en los pies de Federico Valverde, la gran oportunidad antes de acabar la primera mitad estuvo en el lado culé. Leo Messi, con una gran precisión, colgó un globo al área que cazó Jordi Alba quedándose solo frente a Courtois, pero el balón se marchó rozando el palo.
Segunda parte
Con el arranque de la segunda mitad el guion del encuentro continuó siendo el mismo. El Real Madrid mantuvo la presión alta y continuo complicando la salida de balón azulgrana que no era capaz de sobre pasar la líneas blancas.
Aun así, como ocurrió en el primer tiempo, el peligro dentro del área lo generaba el Barça. Griezmann consiguió hacerse un hueco en el interior del área y puso un balón en el centro de penalti que Messi, increíblemente, remató al aire.
Pero, con el partido ya roto, los hombres de Zinedine Zidane empezaron a encontrar los espacios y Bale, con su velocidad, llegó con facilidad al área en numerosas ocasiones.
De hecho en las botas del galés estuvo el único gol del encuentro. Mendy cazó al borde del área un balón picado y regaló el pase de la muerte a Gareth Bale que introdujo el esférico en la portería defendida por Ter Stegen, pero, minutos después, el árbitro señalo fuera de juego del lateral izquierdo del Madrid y anuló el tanto.
Tanto Barça como Madrid intentaron anotar el gol que determinara El Clásico para un lado o para otro, pero ningún equipo encontró portería y, diecisiete años después, el partido que paraliza al mundo se quedo sin goles.
Ficha técnica
Alineación FC Barcelona: Ter Stegen, Semedo (A. Vidal, Min.55), Piqué, Lenglet, J. Alba, S. Roberto, Rakitic, F. De Jong, Griezmann (A. Fati, Min.83), L. Suárez, Leo Messi.
Alineación Real Madrid: Courtois, Carvajal, S. Ramos, Varane, Mendy, Casemiro, Kroos, F. Valverde (Modric, Min.80), Isco (Rodrygo, Min.80), Bale, Benzema.
Árbitro: Hernández Hernández.
Estadio: Camp Nou.