La cadena pública no pujará por esos partidos, que se celebrarán el 8 y el 12 de enero, ya que no quieren “blanquear el régimen” de Arabia Saudí. Además, TVE señala causas humanitarias entre los motivos. Mientras, Mediaset y Atresmedia aluden a razones de presupuesto
A menos de dos meses de que se produzca el pitido inicial de esos partidos de la Supercopa de España, esta no tiene cadena donde emitirlos. Todo ello se produce, después de que Televisión Española, principal candidata a pujar por ellos, ha decidido no entrar en esta. Las causas señaladas por el ente público son claras. Por un lado, no quiere emitir nada que tenga que ver con un evento deportivo ubicado en un país, Arabia Saudí, donde no se respetan los derechos humanos. Además, el desplazamiento del equipo de RTVE a este, tendría un coste muy elevado.
Los dirigentes del medio público han confirmado su negativa a la entrada en la puja, fijando que “es una decisión soberana de la dirección de TVE, es una cuestión de coherencia”. Ya que consideran que existe una “especia de blanqueamiento del régimen saudí. La televisión pública tiene unas políticas de mayor apoyo al deporte femenino y sería contradictorio apostar por un país que restringe a las mujeres la opción de hacer deporte”.
Respecto a las cadenas privadas, tal y como apunta El Español, Mediaset y Atresmedia ya han establecido su negativa a emitirlo principalmente a consecuencia del presupuesto. Ya que ambos grupos de comunicación no tenían previsto dicha cita. Todo ello, se produce días después de confirmar que Telecinco y Cuatro serán las cadenas en las que se podrá ver la próxima Copa del Rey entre 2019 y 2020.
Así, de momento no existe un medio que se perfile para emitirlo. Los dos grandes favoritos ahora son DAZN y Telefónica. El plazo que la Federación Española tiene, expira el 28 de noviembre. Es decir, en menos de diez días. En sí, la emisión constaría de tres partidos: Valencia – Real Madrid y Barcelona – Atlético, además de la final que se jugaría del ganador de cada semifinal.
La RFEF pretendía obtener 4 millones de euros por su emisión. Una cifra, que se sumaría a los 80 millones que ya ha conseguido por esa venta a Mediaset de los derechos para emitir la Copa del Rey.
A todas estas noticias, el presidente de la Federación Española de Futbol, Luis Rubiales ha contestado al ente público el pasado domingo en su rueda de prensa de las Rozas, fijando que “es perfectamente revocable. RTVE se ha comprometido con una competición de motor que se va a celebrar allí”, haciendo alusiones a otras decisiones de la corporación pública.
Luis Rubiales durante la rueda de prensa en la que contesta a RTVE | Fuente: Agencia EFE
Aparte de las críticas que efectuó hacia Televisión Española, hizo referencia a una de las decisiones más criticadas, la sede. “Había dos caminos. Acabar con la competición o buscar un formato atractivo que generase interés y más ingresos. Hemos salido fuera de casa por dinero. Es verdad”. Respecto a esas acusaciones de RTVE, estableció que “también es una realidad que hay países con desigualdades en salud, con desigualdades en alimentos y con desigualdades sociales, donde nacer hombre y nacer mujer no es lo mismo. Podemos dar la espaldas a esos países, teniendo en cuenta que esos ingresos son los mismos que tendríamos en otros países, o tratar de ayudar y de transformar”, esputó Rubiales.
Audiencia
El futbol en televisión siempre ha sido un éxito. Es una obviedad. Traduciendo esto ha cifras, encontramos que el año pasado, las cifras fueron astronómicas. La Supercopa, celebrada en Tánger (Marruecos), enfrentaba al F.C. Barcelona frente al Sevilla y que culminó con la victoria del equipo azulgrana 1-2, fue seguido por 4.785.000 espectadores. Esto traducido a cuota de pantalla, permitió a La 1 alzarse como líder de la noche con un 36,5% de share. Esto hizo imponerse a otras ofertas como fueron las películas de La Ladrona de libros en Telecinco, que consiguió un 8,9% de cuota de pantalla, superior al 8,4% que cosechó Antena 3 con Noches de tormenta.
