Arlette Torres esta pasando por un gran momento profesional, la actriz de series como «Señoras del h (AMPA)» o «HIT» nos ha concedido una entrevista en la que hemos podido repasar parte de su trayectoria, como fue grabar «Confinamiento incluido» o que proyectos le esperan para este 2021, entre otras cosas.
Pregunta: Estudiaste periodismo, pero siempre tuviste claro que te querías dedicar a la interpretación, ¿Por qué decides estudiar periodismo y cómo recuerdas esos años en los que ya sabías que tu “destino” era bien distinto a ese?
Arlette: En realidad, sinceramente pienso que no lo tenía tan claro, aunque siempre lo tuve delante de mis narices (risas). Me di cuenta de lo que quería cuando comencé a escucharme de verdad -mis necesidades y mis sueños- y fue cuando decidí dedicarme profesionalmente a ello. La interpretación siempre integró cada etapa de mi vida, pero no dejaba de verla como un juego o un hobbie, tal vez condicionada por el entorno; en una sociedad en la que l@s artistas somos considerad@s unos “rarit@s” (risas) era normal no pensar en tomármelo ‘en serio’. También, en parte influenciada por mis padres, que se preocupaban por mí y me aconsejaban tener un “plan A” un poco más estable y menos ‘incierto’. Mi padre, siendo actor, ya tenía experiencia en los subes y bajas de la profesión. Sin embargo, la vida misma también es así constantemente: incierta. No sabemos nunca lo que va a pasar mañana. Así que después de todo, decidí tomar el riesgo. Estudié periodismo y me gradué, a la par que también me formaba como actriz en la Compañía Nacional de Teatro. Hacía prácticas de periodismo en una revista y en mis tiempos libres acudía a todos los castings que podía y participaba en cuanta obra de teatro se me presentaba. Así que no siento que haya perdido el tiempo en absoluto, sino todo lo contrario. Fueron años muy productivos y los recuerdo con mucho amor y alegría. Fue una época agitada, pero muy bonita. Y al fin y al cabo no pienso que una cosa esté tan desligada a la otra; los actores, las actrices, interpretamos y somos comunicadores. Cada enseñanza te sirve siempre para algo… y para mucho. A mí me gusta estar en constante aprendizaje.
P: Además trabajaste en diversos oficios hasta convertirte en actriz ¿Qué consejo le darías a esa gente que tiene claro cuál es su objetivo, pero que tiene que empezar desde cero y no sabe si finalmente logrará conseguir sus sueños?
A: Los caminos de cada un@ son diferentes. Así que más que consejos, prefiero sugerir cosas desde mi experiencia. Los sueños se cumplen. Lo primero y más importante es aprender a escucharse y a ser lo más honest@s posibles con nosotr@s mism@s. Luego viene el prepararse, estudiar, ser perseverante, trabajar con humildad, disciplina y respeto, aprender a ser paciente… Y por último confiar; en nuestras aptitudes, en nuestro instinto, en nuestros talentos. El miedo paraliza y bloquea. Y no hay nada como equivocarse para aprender. El ensayo y el error son grandes aliados en esta profesión y en la vida. “Echar pa’ lante”, como decimos en Venezuela, y fluir con lo que venga.
P: Has participado en numerosas películas, series y obras de teatro ¿alguno de estos trabajos supuso un antes y un después en tu carrera?
A: Más que ‘un antes y un después’, considero más bien que han supuesto un punto enfático. Por ejemplo, la película “El rumor de las piedras” me permitió entrar en el panorama cinematográfico venezolano y viajar a festivales de cine de prestigio internacional; gracias mi trabajo en el largometraje “Cenizas eternas” recibí una nominación a Mejor Actriz en el Festival de Cine Venezolano, compitiendo con tres de las que considero grandes actrices del cine venezolano. Y, por ejemplo, mi trabajo en el “El guardián invisible”, de Fernando González Molina, aun siendo un personaje cortito, me dio un buen impulso profesional en España, al tratarse de una producción de gran envergadura. Poquito a poco, se van sembrando, cosechando, y recogiendo frutos.
P: Fuiste partícipe de la película “Azul y rosa” que se llevó el Premio Goya a la Mejor Película Iberoamericana y también fuiste nominada a Mejor Actriz de Reparto en el Festival de Cine Venezolano en 2012 por la película “Cenizas Eternas”. ¿Qué se siente al recibir y ser nominada a galardones de este tipo?
Los premios y las nominaciones son un reconocimiento a la labor y al esfuerzo. Y para mí representan un incentivo para seguir trabajando con entusiasmo, perseverancia, respeto y amor por lo que hago.
P: 2020 a pesar de la pandemia, ha sido profesionalmente un gran año para ti, con proyectos como las series “HIT” y “Señoras del (h)AMPA” que han tenido una gran acogida por parte de los espectadores. ¿Qué nos puedes contar acerca de tus personajes en estas dos series?
A: Me siento agradecida y muy afortunada de poder estar siendo productiva en estos tiempos y más en lo que me gusta hacer. Ha sido un regalo y una bendición desde todo punto de vista. Primero, por la acogida del público y además por todo lo que ha significado la experiencia de conocer, compartir y trabajar con gente talentosísima y excelentes personas. Ha sido maravilloso haber tenido la oportunidad de interpretar -en paralelo, además- a dos mujeres con historias tan diferentes entre sí: Raquel (en “Señoras…”), es desfachatada, sin pelos en la lengua y con un pronto ‘peligroso’ (risas); y Patricia (en “HIT”), es una madre abnegada, entregada a su familia, que más bien intenta pasar desapercibida. Prefiero contar poco porque ambas series merecen ser vistas.
P: Y hablando de pandemia… has grabado la película “Confinamiento incluido” en Béjar (Salamanca), con un elenco espectacular, ¿alguna anécdota que contar durante el rodaje?
A: (Risas) ¡Muchas! (risas) Hay que tener en cuenta el hecho de que el equipo estuvo prácticamente ‘confinado’ durante tres semanas en Béjar, mientras rodábamos. Fue en agosto, apenas saliendo del confinamiento de la vida real. Debíamos hacer la película en tiempo récord y además cuidarnos entre tod@s para poder sacar adelante con éxito el proyecto. Allí ya hay una película detrás de la película. Una anécdota en particular especial para mí fue una tarde de cháchara que mi compañera Mara Güil y yo compartimos en nuestro día libre con el maravilloso Don Saturnino García. Todas y cada una de sus historias son como para enmarcar, como para guardar como un tesoro y no olvidarlas jamás. Conocí y compartí con gente espectacular. Fue una experiencia que tod@s recordaremos y que verá luz muy pronto en la gran pantalla.
P: En cuanto a teatro con “Fahrenheit 108” habéis apostado más que nunca por la cultura segura ¿como ha sido actuar en tiempos de pandemia?
Emocionante, la verdad. Con un poco de incertidumbre cada día porque nos lanzamos al proyecto sin saber a ciencia cierta si realmente íbamos a lograr estrenar, hacer todas las funciones y/o culminar la temporada. No había nada seguro; en realidad en circunstancias normales tampoco lo hay. Así que nos arriesgamos ¡y nos fue muy bien! Todas las funciones prácticamente agotadas -dentro del aforo permitido, claro está- y ninguna incidencia o sesión suspendida. Normalmente cuesta mucho sacar el trabajo adelante, sobre todo producciones de corte independiente como es nuestro caso, y en estos tiempos ha significado un gran esfuerzo desde todo punto de vista. Por fortuna, nos hemos visto recompensadas con éxito y con la acogida del público.
P: Y mirando tu Instagram vemos que el yoga se ha convertido en algo fundamental para ti. ¿Cómo llegó el yoga a tu vida?
A: Llegó para quedarse, en un momento en el que me encontraba muy dispersa emocional, espiritual, mental e incluso físicamente. Necesitaba parar, reencontrarme conmigo y reconectar con lo esencial. Y la práctica del yoga me ayudó (y me sigue ayudando) a ello. Literalmente, me ha cambiado la vida. El yoga va más allá de ser una práctica física, como much@s piensan. Para mí, desde mi experiencia, es una herramienta constantemente transformadora, que ayuda a sanar (por dentro y por fuera), a cambiar de perspectiva, a modificar la forma de ver el mundo y de vivir la vida. De allí que sea fundamental y vital para mí.
P:¿Qué nuevos proyectos te depara este 2021?
A: De momento, en lo personal, seguir entrenándome para vivir con salud -el bien más preciado- y vibrando en la energía del amor, la serenidad, la plenitud y armonía. Lo demás va llegando solo. ¿Laboralmente hablando? Un par de proyectos audiovisuales preciosos y dos giras con dos montajes teatrales. A ver qué tal… Como decimos los venezolanos “como vayamos yendo, vamos viendo”. ¡A por un 2021 con flow!
