Las escuelas de Nueva York vuelven a echar el cierre después de sobrepasar la tasa del 3% de contagios por coronavirus en la última semana.
La tercera ola de Covid19 sigue recrudeciéndose en Estados Unidos a cada jornada que pasa. El país suma más de un millón de nuevos positivos semanales y muchos estados empiezan a adoptar nuevas medidas para contener el avance. Después de muchos días bordeándolo, ayer Nueva York rebasó la tasa de contagios que la ciudad había puesto como límite para poder seguir con las escuelas abiertas.
Richad Carranza, responsable del Departamento de Educación, fue el encargado de anunciar la vuelta de la educación a remoto a todos las escuelas de Nueva York. Unos colegios que permanecían semiabiertos desde hace ocho semanas, cuando la mejoría de la emergencia sanitaria permitió a los neoyorquinos volver a las escuelas.
Esta nueva medida adoptada supone el primer gran paso atrás desde que en primavera Nueva York se convirtiera en la «zona cero» de la Covid19 en Estados Unidos. Entonces la ciudad tuvo que acoger frente a sus costas al buque hospital USNS Confort ante el desborde del sistema sanitario en la que fue una de las imágenes más impactantes de la emergencia sanitaria en todo el país.
Críticas al alcalde Bill de Blasio
Las nuevas medidas anunciadas y que entrarán en vigor a partir del día de hoy se han convertido en un arma arrojadiza contra el alcalde de la ciudad. Las familias de Nueva York no han dudado en criticar el cierre de unos colegios donde según las últimas cifras, la tasa de contagios se ha demostrado muy por debajo con respecto a otros lugares de la ciudad.
Desde los padres se apunta a que esta medida se ha tomado bajo la presión del sindicato de profesores de Nueva York. El sistema educativo neoyorquino es el más grande de todo el país y esta nueva decisión envía a miles de jóvenes a sus casas, muchas de las cuales no cuentan con las garantías suficientes para asegurar una educación desde allí.
Limitación de reuniones y cierre de bares
Los colegios no han sido los únicos que han visto limitada su actividad ante el avance del coronavirus en Nueva York. Estados Unidos se prepara para la gran noche de Acción de Gracias y desde hoy en la «ciudad que nunca duerme» los bares estarán obligados a echar el cierre a las 10 de la noche. Para evitar un aumento de la tasa de contagios en los hogares, las reuniones privadas se han limitado a un máximo de 10 personas.