El partido de Pablo Casado se centrará en mantener la unidad nacional y en fortalecer la nación.
A un paso de las elecciones generales el Partido Popular afronta la campaña con un programa electoral de hasta 500 medidas. Casado habla de “un contrato con España” y un “fortalecimiento de la nación”. El plan de los populares se encuentra dividido en diez bloques, destacando leyes que regulan la inmigración, la violencia de género y centrando el foco sobre las leyes que defienden “la unidad de la nación”. Asimismo, rehúyen temas de aborto y corrupción.
El PP ha asegurado que una de sus prioridades será la reforma de la educación actual, priorizando la educación concertada sobre la pública e incluyendo un MIR para profesores y que tendrá el castellano como lengua central. El PP de Pablo Casado aboga por la recuperación de los valores del PP, un PP “sin complejos”, apelando a lo conseguido por el expresidente Aznar.
Sobre temas de violencia de género, los Populares prometen incluir los asesinatos por violencia de género en los supuestos de prisión permanente revisable. Con respecto al feminismo, la vicesecretaria de comunicación y portavoz del Partido Popular sostenía en una entrevista que “la ley contra la violencia machista tiene ciertos defectos” y criticaba que “una mujer por el hecho de serlo tenga presunción de veracidad”. “A las mujeres en Andalucía lo que más les importa es tener un empleo de calidad, la sanidad y la educación”, añadía la vicesecretaria criticando la ley andaluza contra la violencia machista, la cual considera, en parte, defectuosa. El PP añade la puesta en marcha de un plan contra la brecha salarial y la creación de una ley que obligue a las empresas a fijar objetivos de igualdad.
Casado insta a la aplicación del 155 sobre Cataluña, durante el tiempo que sea necesario, prohibiendo además indultos por secesión o rebelión. El PP luchará para mantener la cohesión nacional añadiendo una Ley de Lengua, Ley de Símbolos Nacionales y una Ley de Concordia, que tendrá como objetivo destruir la interpretación sectaria de la historia que hace la izquierda y “poner nuestras diferencias a la altura de los tiempos”, que sustituirá a la actual Ley de Memoria Histórica. Una de las medidas que sostendría el partido con la validación de dicha ley sería mantener en manos de la Iglesia el Valle de los Caídos.
En materia de inmigración, el partido azul pretende impulsar una política de inmigración legal y ordenada, integrar a los in.migrantes legales y luchar contra las mafias. “La lucha contra las mafias de inmigración ilegal será una prioridad basada en la cooperación con los países de origen y en el rechazo en la frontera”, añadiendo la necesidad de mejorar las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para combatir la inmigración irregular.
