Tras la reunión de la Mesa del Congreso se confirma la suspensión de los políticos independentistas presos.
Este viernes llegó el final de la guerra entre el Tribunal Supremo y Mertixell Batet sobre quien debería suspender a los políticos presos. La presidenta del Congreso ha suspendido a los independentistas Oriol Junqueras, Jordi Turull, Josep Rull y Jordi Sánchez.
El PSOE, PP y Ciudadanos han votado a favor, mientras que Unidas Podemos es el único partido de la Mesa que han votado en contra de la suspensión. Esta decisión puede tener una consecuencia muy interesante para el posible Gobierno de Pedro Sánchez. Si estos cuatros diputados no devuelven su acta, la mayoría disminuiría por lo que a Sánchez no le haría falta pactar con los partidos independentistas para conseguir formar un gobierno de izquierdas.
Lo que por ahora queda es esperar para ver lo que dicen los letrados del Congreso sobre como se plasma la suspensión de los diputados. Mientras tanto el PP y Ciudadanos dicen que ha sido posible esta suspensión, no por el reglamento establecido, si no porque ellos han presionado a Batet para que suspendiera a los políticos presos.
Acerca de la consecuencia de que pueda disminuir la mayoría, Ciudadanos se opone totalmente. El partido que consiguió 57 escaños en las generales mantiene que la mayoría debe de ser de 350 que es el número que constituyó el Congreso. Si los diputados suspendidos no se quedaran con el acta, la mayoría no se movería. Pero si estos deciden no devolver el acta la mayoría baja a 346 y Pedro Sánchez evitaría pactar con ERC.
Se ha conseguido terminar con todo este embrollo antes de las elecciones europeas, municipales y autonómicas del domingo 26 de mayo. Unas elecciones de las que depende mucho el posible pacto de Sánchez con Pablo Iglesias, todo pasa por los Ayuntamientos.