Tras la última oferta del grupo socialista, Podemos mantiene la idea de que si hay acuerdo será tanto de programa como de estructura de gobierno con un reparto de competencias.
A escasas horas para la presentación de un programa de 300 medidas por parte del PSOE, en las cuales el partido morado debería verse representado según los socialistas, Podemos las recibe de una manera agridulce. En palabras de la Portavoz de Unidas Podemos, Noelia Vera: «Si nos sentamos a hablar con el PSOE es para hablar de Gobierno integral que incluya programa y que incluya estructura de Gobierno», respondiendo la portavoz a la pregunta de si se sentarían con los socialistas a negociar en caso de que les llamaran para hablar de un acuerdo programático. Cosa que ya ha ocurrido.
Pedro Sánchez ha llamado a Podemos a un entendimiento programático en la entrevista con el medio EL PAÍS del pasado 31 de agosto. Ha pedido de nuevo que se reúnan los equipos negociadores y posteriormente una reunión con líder de Podemos, Pablo Iglesias.
A pesar, de esto ambos partidos siguen insistiendo en sus posiciones de manera inamovible. José Luis Ábalos, secretario de Organización del PSOE, esta mañana insistía en un Ejecutivo formado sólo por los socialistas. A lo que la portavocía de Vera respondía que dejan claro que «hay una falta de intencionalidad para llegar a un acuerdo». «Falta voluntad», añadía.
Pedro Sánchez, en la entrevista con EL PAÍS, declaraba que “España no se podía permitir la inestabilidad de gobierno” que lo podría provocar un gobierno de coalición, poniendo aquí como ejemplo a Italia. Vera, respondía: Podemos: «Un gobierno en solitario se demuestra inestable, ya lo hemos vivido. El proyecto no funcionó, duró ocho meses. La intención es que haya estabilidad, es necesario que el gobierno comparta». Para luego añadir que los socialistas deben buscar la fórmula porque con su actitud «están ninguneando a toda la Cámara».
Cerraba su discurso, la portavoz Vera, así: «Las posibilidades son o un pacto de izquierdas o uno de derechas».
Avance al futuro. Vol 3
Las últimas palabras de Noelia Vera dan para pensar. El buque insignia de la campaña del PSOE en las pasadas elecciones fueron que no avanzara la ultraderecha en el país. Lo consiguieron y, tras dos intentos de voto en el Congreso de los Diputados de una mayoría de izquierdas aparente, meses después la ciudadanía española está evocada a un nuevo adelante electoral si repite el escenario político que se ha visto en verano.
Con una crisis de gobernabilidad evidente, un agosto casi desaparecido por ambos partidos políticos, unas últimas 48 horas donde comienzan a oírse voces ególatras que ya suenan demasiado conocidas y unas líneas demasiado rojas e inquebrantables; la jornada de reflexión tras el anterior intento fallido de formación de gobierno no ha sido de reflexión, sino de puras vacaciones.
