El Congreso ha aprobado la propuesta del Grupo Parlamentario Socialista de abolir la prostitución. Los socialistas lograron el apoyo necesario en el pleno del martes, pero con críticas por «intereses partidistas» de todos los grupos.
El PSOE logró ayer la aprobación de una de sus grandes promesas en materia de igualdad de la legislatura: avanzar en la abolición de la prostitución. La proposición no de ley del PSOE trataba de abolir, con los medios que se han de fijar, la prostitución e instaba al Gobierno a aprobar una ley contra la trata, algo a lo que el Ejecutivo de Sánchez se comprometió hace meses, pero que el adelanto electoral no ha permitir materializar en el Congreso.
Adriana Lastra, portavoz del Grupo Socialista en el Congreso y vicesecretaria del PSOE, ha afirmado ser consciente de que existe un debate en la opinión pública sobre este tema en el que las distintas fuerzas políticas marcan «matices». Ha explicado que que la opinión del PSOE siempre ha sido la de identificar la prostitución y la trata sexual como una forma «extrema de violencia» y la demanda de prostitución «como la causa que genera la trata». También la asturiana ha hecho hincapié en que no es posible un país en igualdad entre hombres y mujeres mientras «convivamos de manera normalizada con violaciones de Derechos Humanos en las carreteras, los parques, los polígonos y los pisos».
Han apoyado esta medida el Partido Popular e Izquierda Unida, que no Unidos Podemos, que han votado en contra junto a PNV, Ciudadanos, Compromís y los independentistas catalanes. La popular Carmen Quintanilla ha asegurado que su grupo está a favor de una ley integral contra la trata, pero que no es el momento para debatir sobre la prostitución. Ha acusado al PSOE de llevar la enmienda a la Cámara Baja para «hacer campaña electoral».
La diputada de Unidos Podemos Sofía Castañón ha criticado que los socialistas traigan a la Cámara la abolición de la prostitución a través de una proposición no de ley que, según ella, no aborda el tema con profundidad, sin innovar ni proponer nada nuevo.
Desde Ciudadanos, Patricia Reyes ha recriminado al PSOE que «intenten darle lecciones de feminismo» y que «prohíben todo lo que no les gusta», mientras que Ciudadanos «apuestan por la libertad». Ha desatado la polémica al asegurar que no toda la prostitución es forzada y que «hay niñas y mujeres que no son forzadas a prostituirse». Según Reyes, el PSOE ha forzado votación para dar «un mitin electoral».
Joseba Aguirretxea, del PNV, ha asegurado que el PSOE «no ha elegido ni el mejor momento, ni el mejor modo» para tratar la abolición de la prostitución. ERC también ha lamentado que el tema «se traiga como una PNL -Proposición No de Ley-«, asegurando que «se nota que estamos en campaña».
Esta PNL se tramitará cuando la nueva mesa del Congreso reanude su trabajo, tras las elecciones generales del 28 de abril.
