Terminar con el legado de Donald Trump y la lucha contra la Covid19 centrarán todos los esfuerzos de Joe Biden en el inicio de su legislatura.
Joe Biden ya es oficialmente el 46º presidente de los Estados Unidos y el que prometía ser el «presidente tranquilo» tiene delante suya un país sumido en el caos. Con los últimos latigazos de Donald Trump coleando y el Covid19 azotando el país, los primeros 100 días de mandato de Joe Biden serán los más importantes que se recuerdan en las últimas décadas.
Este inicio de mandato marcará en gran medida el camino a seguir por Joe Biden. Consciente de ello, el presidente estadounidense no perdió tiempo y en sus primeras horas ya firmó 15 ordenes ejecutivas destinadas a frenar el avance del coronavirus, el cambio climático, la inmigración y las deudas estudiantiles. Este sólo fue el primer paso para afrontar los 10 retos más importantes que tendrá Joe Biden.
Ser el presidente de todos los estadounidenses
Consciente de la división provocada por Donald Trump, Joe Biden afirmó en su toma de posesión que sería el presidente de todos. La erosión democrática es innegable y conseguir acabar con las sospechas del fraude electoral será el primer paso en la unión de ambos bandos. Pese a la infinita cantidad de pruebas, un importante porcentaje de los estadounidenses creen que se robaron las elecciones a Donald Trump y sólo una política de concordia puede frenar las dudas sobre la legitimidad de la presidencia de Joe Biden.
Frenar los efectos del Covid19
Estados Unidos ha superado los 25 millones de infectados por coronavirus y no parece que estas cifras vayan a frenar su rápido avance. Joe Biden ya ha firmado una orden que obligará a llevar mascarilla en todos los edificios federales y a lo largo de estos 100 primeros días tendrá que trabajar en una concienciación social que permita frenar la que ya es la peor crisis sanitaria de la historia de Estados Unidos
100 millones de vacunas en los 100 primeros días
Con las vacunas de Pfizer/BioNTech y Moderna ya en circulación, una rápida vacunación será el principal instrumento para frenar el avance del coronavirus. Joe Biden declaró en sus primeras horas que trabajarían por agilizar la distribución de las vacunas y afirmó que suministraría 100 millones de dosis en sus 100 primeros días. El éxito de este objetivo pasará por convencer a gran parte de la sociedad de una efectividad de la vacuna que a día de hoy muchos siguen poniendo en duda.
Reactivar la economía
Los efectos del coronavirus siguen castigando la economía de la sociedad estadounidense. Los cheques enviados por la Administración Trump no han sido suficientes y Joe Biden ya trabaja en un nuevo paquete de estímulos que enviará al Congreso. Los efectos de esta iniciativa se empezarán a ver a mitad de febrero y sólo si van de la mano de una rápida vacunación pueden dar dar a Joe Biden la tan ansiada recuperación económica.
Lucha contra el cambio climático
Las primeras horas de Joe Biden en la Casa Blanca sirvieron para la vuelta de Estados Unidos al Acuerdo Climático de Paris. Esta nueva medida que no dudo en criticar el senador Ted Cruz es solo el primer paso de la política «verde» del nuevo presidente. En la campaña electoral ya afirmó que sería el presidente que iniciaría la transición ecológica de un país que durante los últimos cuatro años ha tenido a el cambio climático como una de sus menores preocupaciones.
Crear una nueva política migratoria
Donald Trump legisló con un discurso en contra de la inmigración y virar el rumbo de la política migratoria del país será otro de los principales objetivos de Joe Biden. El nuevo presidente ya ha eliminado las restricciones de viajes con países de Oriente Medio y Asía Central y el siguiente paso de Biden será proteger el programa DACA que tantas polémicas ha dejado durante la presidencia de Trump.
«Impeachment» a Donald Trump
La toma de posesión de Joe Biden parece no haber frenado las ganas del Partido Demócrata de iniciar contra Donald Trump un juicio político. Chuck Schumer, líder de la mayoría demócrata en el Senado, ya ha informado que el «impeachment» se debatirá en la Cámara Alta a partir del 9 de febrero. Las dudas acerca del apoyo por parte de los republicanos, necesario para ser aprobado, y el lastre que puede suponer para la aprobación de medidas necesarias son las principales dudas que surgen en torno al que será el segundo juicio político a Donald Trump.
Frenar el avance de China
China y Rusia volverán a ser las principales preocupación de Estados Unidos de fronteras hacia afuera. El ascenso del gigante asiático, acrecentado por la crisis del Covid19, empieza a ser una gran preocupación para un país que puede ver reducida su protagonismo en el mapa político internacional. La confrontación creada por Donald Trump tendrá que revertirse con un dialogo que se antoja necesario y beneficioso para ambas potencias.
Unir a republicanos y demócratas
Con una ajustada mayoría en el Senado y las elecciones de mitad de mandato en dos años, que Joe Biden consiga apoyos en las filas republicanas será el seguro necesario para sacar adelante la legislatura. Un objetivo que parece no haber empezado muy bien después de que la nueva congresista Marjorie Taylor Greene haya presentado artículos para la destitución de Joe Biden tan sólo 24 horas después de tomar posesión del cargo. Una petición que a pesar de que no saldrá adelante, nos da una clara muestra de la oposición clara que hay en algunos sectores del Partido Republicano hacia la figura de Joe Biden.
Terminar con el legado de Donald Trump
A pesar de las numerosas crisis de su mandato, la política económica y el discurso populista han hecho de Donald Trump una figura que sigue contando con grandes apoyos. Su salida de la Casa Blanca no supone el fin del «Trumpismo» y su enorme legado que encontramos tanto en la sociedad como en numerosos tribunales. Cortar las raíces de su mandato será la misión de Joe Biden si quiere ser el presidente encargado de dirigir la recuperación.
