Tras largos meses de espera, finalmente la nueva temporada de Fórmula 1 da comienzo el próximo 5 de julio. Se disputará el Gran Premio de Austria y Renault llega con mejoras en su monoplaza.
En esta temporada 2020, en la que tan solo hay confirmados 8 grandes premios y todos ellos en Europa, cada equipo busca sobrevivir a su manera. A pesar de no haber actividad en pista hasta la próxima semana, las escuderías han podido trabajar en los reglajes y unidades de potencia a lo largo de las últimas semanas. Es por ello que Cyril Abiteboul, jefe del equipo, ha anunciado que Renault llega a Austria con actualizaciones.
La carrera que se disputará en el Red Bull Ring, será la primera prueba de fuego para los equipos, que no han podido rodar en pista hasta el último mes antes del comienzo de la temporada. Renault sin embargo, parte con cierta ventaja, ya que se las apañó para poder protagonizar su particular test en el mismo trazado donde se celebrará el Gran Premio de Austria.
Tres mejoras acumuladas en un gran premio
El plan inicial de Renault en este 2020, antes de verse afectado por la crisis sanitaria, era incorporar mejoras en su monoplaza en las carreras tres, cinco y seis. Corresponderían a los grandes premios de Vietnam, Países Bajos y España. Sin embargo, la extraordinaria situación de esta temporada, ha hecho que el Mundial arrancase en el Gran Premio de Austria.
A pesar de no disputarse las carreras previas, Renault llega a Austria con la incorporación de las tres mejoras que estaban previstas. El equipo ha trabajado duro para poder desarrollar las actualizaciones de sus monoplazas, sin poder probar en pista real, sus beneficios.
Aunque Renault quiera distanciarse de la zona media de la parrilla con las tres actualizaciones con las que llega a Austria, Daniel Ricciardo, piloto de la escudería francesa, sigue pensando que estará muy ajustado respecto a sus rivales.