El próximo Gran Premio de Bahrein tendrá el clima como protagonista. Se prevé viento en los tres días que durará el evento.
Lo cierto es que desde su inclusión en el calendario de Fórmula 1, nunca hemos visto una gota de lluvia en el Gran Premio de Bahrein. Los primeros informes meteorológicos prevén una pequeña posibilidad de tormentas, casi descartable. Sin embargo se prevé viento tanto en los libres, como en clasificación, como en la carrera. Un factor que puede ser clave para todos los pilotos.
En 2018 vimos como en Abu Dabi llovía durante la carrera. El riesgo de precipitaciones en domingo es prácticamente nulo. Aún y así, las previsiones anuncian alguna opción de tormenta espontánea.
Una pista muy caliente y polvorienta
En el trazado de Sakhir, los pilotos se encontrarán con el asfalto muy caliente, especialmente en las primeras tandas libres. El año pasado se registraron 10ºC de diferencia entre la temperatura del asfalto desde los libres 1 a la carrera.
En los últimos libres y en la propia clasificación, la temperatura del trazado será más similar a la que habrá en carrera el domingo. Se prevé viento durante todo el fin de semana, de modo que los equipos deberán tener en cuenta este factor climatológico tan difícil de controlar.
De hecho, la previsión es que el domingo sea cuando el viento sea más notable. Esto puede afectar a la estabilidad de los Fórmula 1. Los pilotos deberán prestar atención en los puntos de frenada y en los adelantamientos.
Una de las características que también compone el trazado del Gran Premio de Bahrein, es el polvo. Al estar en el desierto, es habitual que veamos polvo y arena en la pista. El asfalto no es limpio y si el viento está presente, todavía se ensuciará más.
Se prevé un fin de semana interesante en el Gran Premio de Bahrein. Mercedes quiere seguir mandando con sus dos pilotos, y sus rivales irán de caza. Hay equipos que todavía tienen que demostrar mucho y Bahrein puede ser una buena oportunidad.