La nueva temporada de Fórmula 1 dará comienzo el próximo 5 de julio y en 10 semanas se celebrarán 8 grandes premios. Existe un hecho que preocupa a los equipos de Fórmula 1, y es el subministro de piezas de repuesto.
El calendario congestionado en le que se encuentran las 8 primeras carreras de la temporada, en tan sólo 10 semanas, llevará al límite a pilotos y equipos. La crisis sanitaria ha llevado a que el inicio de temporada se haya aplazado hasta el 5 de julio, y con todas las medidas de seguridad necesarias para evitar casos de COVID-19. El hecho que preocupa a los equipos es la gestión de las piezas de recambio para sus monoplazas.
Viviremos dos grandes premios seguidos en Red Bull Ring, y seguidamente se celebrará el Gran Premio de Hungría. Habrá una semana de descanso y posteriormente se celebrará el doble gran premio en Silverstone. Tras ello, se llegará al Gran Premio de España el 16 de agosto. Finalmente, con los grandes premios de Bélgica e Italia, se culminará una ronda europea en la que se habrán celebrado 8 carreras en 10 semanas.
Pero puede que no se acabe allí la temporada de Fórmula 1. Se está barajando la posibilidad de celebrar una segunda carrera en Italia, posiblemente en Mugello, y también está sobre la mesa un posible Gran Premio de Portugal.
Una gestión de recursos implacable
Las exigencias de esta temporada excepcional, no sólo sacude a los pilotos, sino también a todos los equipos. El hecho que preocupa más en el padock es la gestión de piezas de recambio para sus monoplazas. Dispondrán de muy poco tiempo para preparar y enviar esos elementos que deben sustituirse en los coches, entre gran premio y gran premio.
Esto supone el temor de quedarse sin piezas en un momento determinado. En el caso de que en una carrera, el equipo sufriera daños en los dos monoplazas, se encontrarían con una situación complicada. La gestión de recursos del equipo debe ser implacable.
Cada accidente, supondrá un mayor dolor de cabeza para todos los equipos, ya que no sólo deberán gestionar la situación económicamente, sino que también lucharán contrarreloj para poder cumplir con la llegada de nuevas piezas.