¿Has pensado en alguna ocasión en ponerte algo de sérum en la cara? ¿Cúal es el mejor sérum facial? Son muchas las personas aún que no se han animado a ponérselo, pero es extraño hoy en día no tener uno de estos en nuestro neceser. El sérum para quién no sepa qué es, es también conocido como suero cosmético y se trata de un tratamiento hidratante que se caracteriza por tener una alta concertación de ingredientes activos y una textura líquida que favorece la rápida y profunda absorción.
El sérum se ha convertido en un producto imprescindible en nuestro neceser de belleza como la bruma facial hidratante. Comenzó a comercializarse como un producto antiedad pero con el paso de los años se ha convertido en un producto necesario a día de hoy en nuestro día a día para todas las edades gracias a su eficacia. Tiene el doble de concentración de activos que una crema hidratante. Su textura en gel muy ligera penetra con una mayor facilidad y rapidez en las capas más profundas de la piel, multiplicando los resultados obtenidos. El sérum puede comprarse en una tienda de cosmética.
El sérum fácil es una base hidratante de textura ligera que cuenta con una alta concentración de ingredientes activos de rápida actuación. La principal diferencia con respecto a una crema facial es la formulación de este que es más concentrada, su textura más ligera y la ausencia de factor de protección solar. Es un producto además ideal como base de maquillaje gracias a su efecto unificador de la piel.
Este producto revolucionario en la actualidad puede usarse en todo tipo de pieles, tanto en aquellas que son grasas como en las secas. En el caso de pieles deshidratadas, aporta una hidratación extra y profunda de la piel. La textura ligera y el gel, hidrata bien la piel sin saturarla por lo que es ideal para aquellas que son más grasientas o mixtas. Los dermatólogos la recomiendan para aquellas personas que sufren muchas manchas en la piel o acné.
Lo recomendable es que el sérum facial comience a utilizarse a partir de los 30 años, momento en el que empiezan aparecer los primeros signos de envejecimiento. El sérum ayuda a la regeneración celular y, además, permite el retraso de las primeras arrugas. Existen muchos tipos de sérum fáciles dependiendo de nuestra necesidad. Entre ellos destacamos el sérum antienvejecimiento que están diseñados para mejorar las pieles de quienes sufren de falta de luminosidad y firmeza, los sérum iluminadores que sirven para aquellas personas con pieles apagadas, el sérum de calmantes que sirve para pieles con picores, sensibles y enrojecidas, los sérum antimanchas que sirven para todo tipo de pieles especialmente las sensibles para difuminar el aspecto de las manchas de la piel, el sérum detoxificantes que son específicos con los que combatir la polución y los agentes externos que tienen un impacto significativo en tu piel, los sérum hidratantes diseñados para aportar un extra de hidratación en aquellas pieles secas y deshidratadas o el sérum microesfoliante que sirve para aquellas pieles que necesitan renovarse y oxigenarse para lucir perfectas.