El Centro de Integración de Menores (CIM) de La Elipa, en el distrito madrileño de Ciudad Lineal, cerró el viernes 5 de marzo sus puertas. Su homónimo en el barrio de La Concepción, en el mismo distrito, lo hizo el 8 de marzo.
La pasada semana expiró el contrato por el que el Ayuntamiento de Madrid prestaba soporte social a menores en situación de vulnerabilidad. Estas actuaciones eran llevadas a cabo con la colaboración de una empresa privada. En ambos centros se ofrecía asistencia y apoyo a unos 90 menores de edad en situación de vulnerabilidad social y económica. Sin embargo, el vencimiento del contrato de gestión y el hecho de que la Junta de Distrito no ha sacado la nueva licitación abocan al cierre a estos centros.
El Consistorio trabaja para habilitar alternativas, pero los usuarios temen que estas se demoren y así lo visibilizarán esta tarde en una concentración. De forma similar, las previsiones más optimistas apuntan a que los centros no podrían reabrir, al menos, hasta que el Ayuntamiento realice unos nuevos pliegos. No se prevé que éstos puedan estar listos antes del mes de septiembre
Por su parte, Más Madrid presionará a la Junta Municipal del distrito de Ciudad Lineal para que «se asegure que los centros no paralicen su funcionamiento mientras se tramita el nuevo contrato». Maysoun Douas, concejal de este mismo grupo, recalca que el Consistorio «ya sabía que iba a caducar y tenían que sacar unos nuevos pliegos». Por el contrario, fuentes municipales responden que «la pandemia ralentizó la tramitación».
Este retraso ha derivado en que 80 menores (39 en La Elipa y otros 41 en La Concepción) vean interrumpido el refuerzo escolar. Estos jóvenes provienen de familias con una situación económica difícil, por lo que también se incide en proporcionarles una alimentación adecuada. «Pero somos mucho más que eso, ya que detectamos sus necesidades relacionadas con la parte emocional, cultural o relacional», precisa Mario Zabala, trabajador social del centro.
El mismo aclara que «no somos una academia para pobres, ni mucho menos», sino un espacio en el que «se promocionan valores y se fomentan las habilidades sociales». Todo ello, mientras los chicos «se encuentran en un entorno saludable», añade la concejala de Más Madrid.
El Gobierno municipal se defiende
El Ayuntamiento aseguró a Madridiario que «la idea siempre ha sido renovar» este proyecto. Desde el Consistorio también puntualizan que los CIM no cierran, pues en estos edificios continuarán ofreciéndose otras prestaciones al margen del apoyo socioeducativo. «Estamos reubicando a los chicos en otros centros; el servicio será el mismo, pero lo prestarán otras personas», explican.
Algunos menores de La Elipa ya tienen una nueva plaza en el Centro de Día de Cruz Roja del distrito y otros escolares del Centro Integrado de Menores de La Concepción se incluirán, a partir del 8 de marzo, en el programa «Al salir de clase» del Centro de Educación Infantil y Primaria Nuestra Señora de la Concepción. No obstante, parece que los jóvenes más mayores tendrán más dificultades para ser recolocados.
La reubicación se está ejecutando «de forma progresiva» y en paralelo a la gestión del nuevo convenio para reanudar el servicio actual. Las autoridades municipales esperan que esté disponible «lo más rápido posible». Zabala señala que «Servicios Sociales ha confirmado que el nuevo contrato se iniciará en septiembre». La empresa adjudicataria se ha comprometido a colocar al personal en otro proyecto, pero prevé que, en total, 12 personas perderán su trabajo.
Sin embargo, desde los trabajadores de los servicios sociales se pone en duda que la administración municipal pueda asignar plaza en a estos menores en otros lugares. Tampoco ven viable que formen parte del programa «Al salir de clase», dado que no se cuentan con las instalaciones suficientes para llevarlo a cabo.
Más Madrid culpa al gobierno
En Más Madrid consideran «un escándalo» no haber preparado a tiempo el nuevo contrato y afean a la Junta Municipal de Distrito su «falta de capacidad de gestión». «No es la primera vez que denunciamos esta situación y el Gobierno municipal no ha hecho absolutamente nada», sostiene Maysoun Douas. La edil no entiende «esta ineficacia» en plena pandemia y «con colas del hambre» en la ciudad y achaca este escenario a «la falta de interés del Consistorio por las cuestiones sociales».
Los vecinos de Ciudad Lineal se han solidarizado con los afectados y hasta cinco asociaciones han convocado manifestaciones. Además, han lanzado una campaña de para recoger firmas en Change.org y evitar la clausura de este servicio. Los 12 trabajadores que componen la plantilla de los dos Centros Integrados de Menores también estarán presentes.