El decreto que regula la nueva normalidad en Castilla-La Mancha permite el 75% del aforo en la mayoría de los establecimientos y eventos sociales y culturales.
Castilla-La Mancha ya ha detallado las medidas que se establecen para la nueva normalidad a partir del próximo lunes. El Consejo Social para la Transición frente al Covid-19, que abarca una treintena de colectivos y representantes del tejido económico y social de Castilla-La Mancha, se ha reunido hoy con el Ejecutivo regional para abordar el borrador del decreto.
El vicepresidente de la región, José Luis Martínez Guijarro, ha calificado el decreto como “un planteamiento claro de intentar compaginar el mantenimiento de estas medidas de prevención con la reactivación de la economía de nuestra región”. Una de las medidas de higiene más reseñables de las propuestas es la limpieza y desinfección entre la reapertura y el cierre cada día en cada establecimiento.
En cuanto al aforo permitido en dichos establecimientos, se establece en un 75% de manera general. En el caso de los pequeños comercios, el espacio ocupado será de cuatro metros cuadrados por persona. Las bodas o eventos sociales similares también permitirán hasta un 75% de su aforo, con un máximo de 250 personas en espacios al aire libre y de 150 en espacios cerrados. Para los velatorios, el máximo de personas permitidas es 50 en un espacio libre y 25 en zonas cerradas.
Los locales de hostelería también permitirán hasta el 75% de su aforo; en cambio, las terrazas podrán ser ocupadas al 100%. Por otra parte, las discotecas y bares de copas el aforo es también del 75% y no se podrá usar la pista de baile.
En el caso de hoteles y alojamientos turísticos, las zonas comunes se podrán ocupar también en esta cantidad, salvo para los albergues, donde se reduce al 50% del aforo. Espacios culturales como bibliotecas, museos o yacimientos también aceptarán hasta el 75% de su aforo, con grupos de no más de 25 personas para las visitas guiadas.
Finalmente, el documento recomienda a los municipios que no celebren fiestas patronales hasta el 15 de julio. El vicepresidente ha aclarado que “en el caso de que alguien quiera realizar algún tipo de fiesta, vamos a exigir al organizador un plan de contingencia”.
