El próximo sábado 25 de mayo, el Valencia CF jugará la final de la presente edición de la Copa del Rey, contra el Fútbol Club Barcelona de Ernesto Valverde, ex entrenador del conjunto che.
El camino hasta dicha ronda no ha sido fácil. El combinado dirigido por Marcelino García Toral ha tenido que evitar grandes piedras que ha tenido durante este camino.
El primer escollo que el equipo del Turia tuvo que sortear fue un envalentonado CD Ebro. El equipo que disputa su temporada en 2ª división B no se lo puso fácil al equipo de Mestalla. El partido de ida comenzó con un resultado adverso para el Valencia. Pero, que, con dos goles del joven gallego, Santi Mina, consiguió darle la vuelta al partido e ir con ventaja a Mestalla. El partido de vuelta fue un partido gris por parte del Valencia, donde el club blanquinegro ganó con un testarazo de Michy Batshuayi.
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En los octavos de final, el Valencia Club de Fútbol se enfrentó al Sporting de Gijón, único equipo ‘vivo’ a esas alturas de competición que no jugaba en primera división. La ida fue un partdio convulso para los muerciélagos valencianos, pues perdieron por 2 a 1 en El Molinón, anotando el gol che tras un disparo de Dani Parejo que rebotó en Gameiro y entró en la meta rojiblanca en los minutos finales del partido. Sin embargo, en el partido de vuelta, el Valencia fue otro equipo totalmente diferente, venciendo por 3 a 0 y clasificándose para cuartos de final.
Tras sendos partidos, el Valencia enfrentaba a uno de los equipos revelación de LaLiga, el Getafe. El club azulón llegaba con muchas ganas a la eliminatoria, pues creían en sus posibilidades y efectivamente así fue. El equipo madrileño se adelantó en el resultado total, ganando 1-0 en El Coliseum Alfonso Pérez. En la vuelta de la contienda, también se adelantó con un gol tempranero de Jorge Molina. A medidados de la segunda parte, el Valencia empató el partido, pero aún así necesitaban dos goles más para clasificarse a semifinales. En el descuento del partido Rodrigo obró el milagro, anotando dos goles para dar el pase al Valencia.
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Los nervios comenzaban a estar presentes en los corazones de los aficionados valencianistas porque se aproximaban a una final después de tantos años sin llegar a una. Pero, antes de poder disfrutar de la final de la competición, tuvieron que lidiar con todo en Real Betis Balompié. El equipo de Setién se adelantó con dos goles, uno de ellos antológico, como el gol olímpico de Joaquín, en el partido de ida. Pero, otra vez en los minutos finales, igualaron la contienda, poniendo un empate a 2 en el Benito Villamarín. Tras el resultado de la ida, el equipo de la Comunitat Valenciana anotó un solitario gol que le sirvió para garantizar su presencia en la final.
Marcelino y sus chicos, tras este duro camino, querrán ganar el torneo. Además, como mayor aliciente, cabe destacar que el Valencia celebra su centenario, por ello tienen motivos extra para ganar la copa de Su Majestad.
